James Pertierra

James Pertierra fue elegido congresista representando al Estado de Nueva York, se ignora las iniciativas apoyadas por el Congresista Pertierra y en que comités participó, antes de pasar a formar parte de un subcomité que debía estudiar si se debía aprobar la ley que obligaba a registrarse a aquellos que poseyeran poderes o habilidades sobrehumanas.

Ante el Comité iban a declarar diferentes personalidades, como Militares de alta graduación, representantes de la Asociación Nacional del Rifle e incluso Henry Gyrich, que ya había defendido la instauración de una ley similar para el registro mutante. Pero sin duda los testimonios estrella iban a ser los de los miembros de los 4 Fantásticos, invitados al Congreso para dar su opinión.

El Congresista Pertierra no pudo llegar a tiempo al inicio de las sesiones, su llegada coincidió con la de un ataque perpetrado por villanos de poca monta contra el Congreso, al parecer obligados por un misterioso aparato que les controlaba mentalmente. Los 4 Fantásticos detuvieron a los atacantes y lograron desactivar el aparato, pero entonces intervino Pertierra afirmando que el ingenio había sido creado por el propio Richards para hacerles quedar bien ante el Subcomité, pese a que sus acusaciones no fueron tenidas en cuenta por falta de pruebas, el subcomité permitió a Pertierra incorporarse por el resto de la sesión.

Sin embargo, las deliberaciones fueron interrumpidas cuando el aparato volvió a activarse emanando ondas mentales para que todos los presentes en la sala, incluyendo el Congresista Pertierra, atacaran a los 4 Fantásticos, como el resto del grupo había salido de la sala, Reed y Susan Richards hubieron de contener a la multitud hasta que Mister Fantástico logró atrapar el aparato y esta vez desactivarlo para siempre.

Ya mas calmados, Reed hizo sus últimos alegatos, construyendo un aparato que era capaz de detectar cualquier desviación del genetipo normal de un ser humano y que podía derivar en la aparición de superpoderes. Es mas que probable que la sensibilidad del invento de Richards estuviera puesta al máximo nivel, puesto que numerosos miembros de la sala dieron positivo en esta desviación del genetipo, incluyendo a varios congresistas entre los que se encontraba Pertierra. Asustados porque se hiciera público, y sin saber nada del ardid de Richards, los Congresistas decidieron archivar el proyecto de ley. No han vuelto a tenerse noticias de James Pertierra desde entonces.