Gilbert, Gregson

Poco se sabe de la juventud y primeros años de Gregson Gilbert salvo lo que se sabe por sus propias palabras, que tuvo una infancia feliz en el seno de una familia formada por él mismo y por su hermana y que creció oyendo historias de fantasía que incluían dragones y otras criaturas mitológicas.

En cierto momento sin determinar, los padres y la hermana de Gilbert murieron en circunstancias que no han sido especificadas, lo que provocó que Gilbert se centrara en sus estudios y en su trabajo, desarrollando una enfermiza obsesión sobre la robótica y la genética super humana.

Tras encontrar trabajo en la Universidad State, Gilbert empezó a trabajar en un proyecto que aunaba sus dos pasiones centrándose en crear una criatura mas poderosa que ningún ser vivo, sin embargo, su afán de terminar el experimento chocaba con el impedimento del Rector Menckin, el cual le prohibió seguir con sus experimentos mientras en la facultad se continuara dando clases.

Sin embargo Gilbert decidió saltarse este impedimento después de recibir un fragmento de meteorito caído del espacio y formado por material desconocido, el plan de Gilbert era reducir su estructura atómica básica en un intento de descubrir la fuerza vital primigenia en ella almacenada.

La fase final del experimento de Gilbert coincidió con una visita al campus de la Universidad por parte de Reed Richards y sus compañeros de los 4 Fantásticos, puesto que Mister Fantástico se disponía a dar una conferencia a los alumnos allí presentes. Gregson había logrado terminar su labor, un enorme robot con forma de los dragones que admiraba en su juventud, pero carecía de los medios para dotarle de vida, fue entonces cuando ante él se presentó el villano conocido como Diablo, que se ofreció a entregarle una pócima de su invención que permitía animar los objetos inanimados.

Sin conocer la naturaleza malvada del villano, Gilbert aceptó la proposición de su “invitado”, que uso su pócima para animar a la criatura, había nacido el Hombre Dragón, pero lejos de convertirse en un objeto de estudio tal y como pretendía el científico, Diablo ligó su voluntad a la del androide obligándole a cumplir sus órdenes, siendo la primera de ellas acabar con la vida de los 4 Fantásticos que habían descubierto su presencia en el campus. La batalla terminó con el Hombre Dragón libre del influjo del villano al cual persiguió encima de un lago helado que cedió ante el peso del androide que se hundió en lo profundo de las aguas encontrando refugio en una cueva subterránea.

El profesor Gilbert se comprometió a vigilar el lago para asegurarse que el Hombre Dragón no volviera a reparacer para convertirse en una amenaza para la humanidad, si era necesario, destruyéndolo, sabiendo que el objetivo de Gregson para crear a la criatura era el estudio y no para convertirlo en una amenaza, Reed aceptó su propuesto tras lo cual los héroes abandonaron el lugar, si bien es cierto que el Hombre Dragón salió del lago y desapareció del lugar sin que el profesor tuviera conciencia de ello y pudiera detenerlo, la verdad es que el científico, dispuesto a no permitir que sus inventos volvieran a usarse para el mal, destruyó todos los planos y especificaciones que le llevaron a construir al Hombre Dragón, con lo que a falta de los planos que lo crearon y del material único con el que fue construido, el androide se convirtió en su ser único.

Gilbert abandonó la Universidad State poco después de la primera aparición del Hombre Dragón, pero un hombre de su intelecto no tardó en encontrar acomodo en otro centro de enseñanza, en concreto en la Universidad Empire State, donde entró en contacto con Diane Arliss, hermana de Todd Arliss, mas conocido como el Tiburón Tigre, a la que aceptó ayudar a crear una máquina que permitiera devolver a su estado humano al villano, sin embargo, otros de sus colaboradores era el Doctor Dorcas científico sin escrúpulos pero que servía de gran ayuda puesto que había sido el creador original del Tiburón Tigre, pero que aconsejó a sus aliados a cometer actos no siempre éticos.

Mientras Gilbert contruía la máquina que debía obrar el prodigio, Diane marchó a Atlantis, puesto que tenía noticias que su hermano permanecía prisionero de Namor, sin embargo, la joven desconocía que Tiburón Tigre había escapado, y cuando Dorma se lo comunicó, lejos de creerla, Diane secuestró a la atlante a la que llevó a la superficie en un intento de “persuadir” a Namor para que le entregara a su prisionero.

Furioso, Namor marchó a la superficie dispuesto a rescatar a su amada para lo cual atacó a la joven Arliss y a Gregson en las instalaciones de la Universidad, todo lo cual terminó en un combate entre el Hombre Submarino y el Hombre Dragón el cual acudió en defensa de su creador, finalmente la batalla terminó cuando la máquina fue accidentalmente destruida durante la contienda, por lo cual Gregson y sus aliados no tuvieron motivos para mantener a Dorma prisionera por lo cual la liberaron.

Mas adelante, un traficante de drogas logró fabricar una diadema sónica que le permitía controlar al Hombre Dragón mediante dolorosas descargas sónicas, tras lo cual lo obligó a secuestrar a su creador al que pretendía obligar a fabricar un ejército de androides similares a su primera creación. El Hombre Dragón localizó a Gilbert al que secuestró, pero el ataque fue presenciado por Julie y Katie Power, miembros del grupo de aventureros conocidos como Power Pack, que si bien no pudieron rescatar a Gilbert si que encontraron al Hombre Dragón el cual, sin la influencia de la diadema, era poco mas que un cachorro por lo que las niñas se lo llevaron a su casa, ocultándolo en la azotea del edificio.

Mientras, Gilbert se negaba a obedecer las órdenes de sus captores de fabricar nuevos androides, e incluso albergó la esperanza de ser liberado después que el Hombre Dragón guiara a Power Pack y a sus aliados Capa y Puñal hasta la guarida de los secuestradores, sin embargo estos recuperaron el control sobre el androide que derrotó a los jóvenes aventureros que fueron usados por los villanos como rehenes para obligar a Gilbert a crear nuevos robots.

El científico fabricó una serie de androides que sin duda hubieran sido la primera línea del ejército de los malvados, pero por fortuna, los jóvenes aventureros lograron escapar y tras liberar al Hombre Dragón, volvieron las tornas de la batalla derrotando a los villanos, tras lo cual Gilbert destruyo sus nuevas creaciones y creo un ingenio que impediría que su creación volviera a ser controlada por agentes externos.

El profesor Gilbert volvió a trabajar para la Universidad State dando clases y dedicándose a experimentos menos peligrosos, pero todavía recibía la visita de su primera creación, a la que cuidaba y daba refugio al tiempo que intentaba entrenarla para que abandonara la via de la violencia. Sin embargo, cierto día el profesor Gilbert fue secuestrado y sustituido por un agente Skrull, que pretendía utilizar los medios de la Universidad para sus propios fines.

Cuando el Hombre Dragón regresó junto a Gilbert, de alguna manera detectó que aquel no era su verdadero creador y lo atacó, y sin duda hubiera acabado con él de no ser por la afortunada presencia de la Cosa y la Antorcha Humana en el lugar que pusieron en fuga al androide, e incluso accedieron a custodiar al skrull (al que consideraban erróneamente como el verdadero Profesor Gilbert) mientras terminaba su trabajo.

Sin embargo el androide regresó, y destruyó el trabajo del alienígena pese a los intentos del skrull por destruir al Hombre Dragón, el hecho que “Gilbert” intentara destruir a su primera creación, después del afecto que le había mostrado durante años, hizo sospechar a los aventureros que algo no marchaba bien en todo este asunto demostrando el engaño, derrotando al Skrull y liberando a Gilbert, el cual pidió a los héroes que dejaran marchar al Hombre Dragón. No han vuelto a tenerse noticias de Gregson Gilbert desde entonces.