Keegan, Joe

Joe Keegan era un tipo corriente, con un trabajo corriente que cierto día estaba regresando a su hogar con su camioneta por la autopista, cuando se encontró a un individuo sorprendente en su camino, era un gigantesco ser de mas de dos metros que no hablaba pero que estaba dotado de enorme fuerza, pero si sorprendente era la criatura, mas sorprendente era lo que portaba en su mano, un humanoide del tamaño de un insecto, que no podía hablar pero se comunicaba telepáticamente.

Comprendiendo que no podía dejar a esos dos seres vagando en solitario por la carretera, Keegan los montó en su camioneta y los llevó a su casa, pero pronto comprendió que necesitaban cuidados científicos que él no podía darles, y creyendo que estaba ante dos mutantes (dadas sus singulares habilidades) y no deseando acudir al ejército puso un anuncio en el periódico con el siguiente texto “mutante singular y con talento busca entorno hogareño y cuidados de personas preocupadas y sensibles o agencias equipadas para ayudar”, con la esperanza que acudiera alguien capaz de hacerse cargo de sus invitados.

Keegan pensaba que su anuncio atraería a mas locos o curiosos antes que a alguien útil, pero en su hogar se presentaron dos personajes singulares, el primero de ellos el Capitán América que quería investigar a ese mutante misterioso, el segundo personaje que acudió fue Magneto, que buscaba confirmar que el extraño era un mutante y si lo era, buscaba reclutarlo para sus propios fines.

Se produjo un combate entre el Capi y Magneto cuando ambos superseres se encontraron, pero la presencia de Keegan detuvo la batalla puesto que el aventurero no deseaba poner en riesgo a inocentes y Magneto no quería verse envuelto en una batalla contra el héroe si la presencia del mutante no se confirmaba. Keegan mostró a Mister Uno (como había llamado al mas pequeño de los seres), al que había buscado acomodo en una pequeña cápsula con respiradores para dotarle de oxígeno y que portaba en su muñequera.

Magneto comprendió que estaba ante un verdadero mutante y que alguien del tamaño reducido de Mister Uno sería perfecto para labores de espionaje, por lo que usó sus poderes para arrancar la muñequera del brazo de Keegan para emprender la huida, sin embargo, al sentir la amenaza sobre su compañero, Mister Dos salió de su escondite y atacó a Magneto al que arrojó fuera de la casa de un golpe, teniendo que enfrentarse al mutante y al Capi, Magneto decidió marchar del lugar en busca de una oportunidad mejor.

Comprendiendo que el Capi podría buscar mejores cuidados a sus amigos de lo que él jamás podría encontrar, Joe Keegan entregó a Mister Uno y Mister Dos a los cuidados del Capitán América, tras lo cual no han vuelto a tenerse noticias suyas.