Zarathos

Zarathos es un demonio antiquísimo que, en una ocasión, cuando la Tierra era joven, fue convocado por un shamán que acordó que tomaría almas en su nombre. De este modo, mientras el hechicero captaba almas para el demonio, Zarathos se iba haciendo más fuerte, hasta el punto que llegó a rivalizar con el mismísimo Mefisto. Esto, por supuesto, indignó a este último, por lo que concibió un plan. Así, robó el alma de un hombre llamado Centurius y le ordenó que hiciera frente a Zarathos. Cuando éste fue a arrebatarle el alma durante la lucha, se vio incapaz de hacerlo porque Centurius ya la había perdido. Fue entonces cuando emergió Mefisto desde su infierno y ambos demonios se enzarzaron en una batalla que ganó este último. Fue de este modo como Zarathos acabó sirviendo a Mefisto.

Siglos después Mefisto hizo un trato con Johnny Blaze; John incumplió su parte del trato y, como represalia, Mefisto unió a Zarathos y al joven como castigo para ambos, lo cual dio origen al ser conocido como el primer Motorista Fantasma.

No fue hasta unos años después cuando Blaze descubrió el origen de Zarathos. Entonces, decidió poner manos a la obra en buscar la solución para librarse de Zarathos de cualquier medio posible. La salvación se presentó para ambos cuando Centurius reapareció. Durante la batalla que siguió a esta reaparición, Centurius fue absorbido al interior de su objeto mágico llamado el Cristal de Almas. Zarathos, por su parte, sintió como se le negó la venganza, y viajó al interior del Cristal para liberar a Blaze de su maldición.

Años después un Zarathos amnésico fue liberado de su cautiverio y se alió con la diosa-demonio Lilith. Lilith fue vencida por los Hijos de la Medianoche, pero en cierto momento ésta sintió que los antiguos sirvientes de Zarathos, los Caídos, habían resurgido. Así, Zarathos creyó que el mundo estaba en el momento propio para que él lo conquistase. Esta campaña de terror la inició asesinando a Dan Ketch, el segundo Motorista Fantasma. Al suceder esto, el resto de los Hijos de la Medianoche se movilizaron para acabar con Zarathos. Finalmente, fue a manos de una espada de poder místico como Zarathos fue convertido en piedra.

Sin embargo, en cierta ocasión, mantuvo en relaciones con Lilith a la que dejó embarazada. Fue durante la conclusión de la saga llamada la Ascensión de los Hijos de la Medianoche cuando ésta apareció por última vez ante la estatua de Zarathos prometiendo vengar su memoria mediante su nueva progenie infernal.