Jeremy Locke

Jeremy Locke era un abogado de Los Ángeles que estaba prometido con Sabrina Cole, quien ejercía como fiscal general. El infortunio quiso que Elektra, una asesina a sueldo, fuera contratada para matar a Terrence Barbur, un traficante de droga que iba a vender información a la policía a cambio de una reducción de pena. Elektra hizo llegar un papel impregnado con veneno a Barbur, que murió instantáneamente. Cole también tocó el papel, por lo que resultó envenenada, aunque con una dosis inferior, que si bien acarreó su muerte, prolongó la agonía de la fiscal durante diecisiete días muriendo justo el día antes de su boda {ELEK 13}.

Locke se propuso vengarse de Elektra, para ello entró en contacto con otras personas que habían sufrido a manos de Elektra y formó La Coalición {ELEK2 14}. La Coalición logró que todos los contactos que tenía Elektra la rechazaran, de forma que no encontró nadie que le propusiera ningún trabajo. Esta situación llevó a Elektra al borde de una crisis de identidad, por que Locke, con la ayuda de su amigo y guardaespaldas Philip Carson, pudieron drogarla y apresarla {ELEK2 10~ 11}.

Locke llevó a Elektra a su mansión de Hollywood Hills, donde la obligó a afrontar la verdadera naturaleza de su ser, la forzó a verse como una máquina despiadada, una tormenta de muerte y destrucción. Agotada por las experiencias de los últimos días y la droga a la que había estado sometida, Locke hizo que Carson abandonara a Elektra en el Desierto de Mohade, con la esperanza que ella misma se quitara la vida, ya que la conciencia de Locke le impedía formar parte de un asesinato, aunque fuera el de la causante de la muerte de su prometida {ELEK2 13}.

El resto de La Coalición, al saber que Locke había capturado y liberado a Elektra acudieron a la mansión de Locke y lo forzaron a que les dijera donde se encontraba Elektra. Locke, si bien no quería participar en la muerte de Elektra, tampoco le importaba su muerte, contó a sus colaboradores el paradero de la asesina. El resto de La Coalición, junto a un grupo de mercenarios, interceptaron a Elektra en el desierto, pero su intervención, más que causar la muerte de la asesina contribuyó a que ella encontrara fuerzas para afrontar su propia vida y mató a todos los mercenarios dejando sólo vivos a dos miembros de La Coalición {ELEK2 14}.

Elektra, casi sin fuerzas, entró en la mansión de Locke con la firme intención de matarlo, pero cuando él consiguió explicarle que su objetivo no había sido el matarla sino el lograr que dejara de matar, la asesina se rindió. Tras limpiarse y descansar una noche, Locke y Carson la condujeron hasta Drake, una superviviente de La Mano y La Casta que trabajaba como maestra de artes marciales en Los Ángeles. La técnica de lucha de Drake era muy superior a la de Elektra, por lo que ésta última aprendió una lección de humildad frente a la maestra. Quedó tan maravillada que, si bien Drake la rechazó al principio, Elektra no cesó en su empeño hasta que Drake la aceptó como alumna {ELEK2 15~ 17}.

Algunas semanas más tarde Los Tres, un trío de asesinos de élite de La Mano, asaltó la mansión de Hollywood Hills, dejando sin sentido a Carson y secuestrando a Locke. El objetivo de Los Tres era recuperar a Elektra para La Mano, por ello usaron a Locke como cebo para atraer a Elektra hasta el desierto de Mohade. Elektra y Carson, que ya habían visto como Los Tres mataban a Drake, atacaron a los ninjas en el desierto. Si bien Elektra había mejorado mucho en sus técnicas de lucha y pudo hacer frente a los asesinos de La Mano, Carson fue asesinado por Sombra, uno de Los Tres. Finalmente el único superviviente de La Mano fue Sombra, quien usó a Locke como escudo contra Elektra. La asesina, aceptando que era la muerte perfecta que tanto codiciaba La Mano, sacrificó a Locke, que murió atravesado por la espada de Elektra, para matar a Sombra {ELEK2 20~ 22}.