Morris Forelli

Morris Forelli es un rico empresario perteneciente a una importante familia mafiosa. A mediados de los años 50 estalló una guerra de bandas en las que estaban involucradas varias familias por el control de los negocios de casinos, blanqueo de dinero y prostitución de Las Vegas. Con la finalidad de poner fin a la disputa el 3 de julio de 1957 se organizó una reunión entre los jefes de las seis bandas a la que iban a acudir los lugartenientes de los mismos. Entre los convocados se encontraba Forelli y su segundo George Sims, sin embargo, cuando Forelli descubrió que Sims le había traicionado preparando un golpe reciente contra uno de sus hijos, envió a un pelotón de ejecución que mató a los reunidos. Acto seguido, los hombres contratados por Forelli se deshicieron de los cuerpos de los mafiosos enterrándolos en un vertedero de vertidos químicos en el desierto de Nevada. Más de cuarenta años más tarde, las fuerzas militares de los Estados Unidos reanudaron las pruebas gamma por orden del Pentágono. Una de las detonaciones se programó en el lugar donde fueron enterrados los restos de los gangsters asesinados. La combinación entre los productos químicos y la radiación gamma devolvió la vida al tejido muerto, que se había conservado gracias a los vertidos tóxicos que lo rodeaban y el calor seco del desierto. Como resultado varias partes de los cadáveres se fusionaron para crear una entidad llamada el Enterrador. Con los recuerdos mezclados de los difuntos, el Enterrador se dirigió a Nueva York con la intención de matar a Forelli. Así, su primer impulso fue destruir uno de los locales del mafioso, lo que trajo la atención del Inspector Lamont, que se puso en contacto con Spiderman al descubrir que un ser sobrehumano estaba involucrado en el asunto {ASM2 51}.

Forelli, por su parte, imaginando la identidad del ser que lo perseguía y viendo que Spiderman se había enfrentado ya a él, decidió proponer al héroe enmascarado diez mil dólares diarios por su protección. Aunque reticente, Spiderman decidió aceptar la oferta {ASM2 52}. Durante los días siguientes, Spiderman defendió a Forelli del acoso del Enterrador enfrentándose a la criatura en varias ocasiones e investigando su naturaleza y la forma de derrotarlo. Además, Spiderman había aceptado llevar un micrófono escondido para intentar incriminar a Forelli en la muerte acontecida en el pasado. En efecto, cuando el Enterrador asaltó la casa de Forelli, éste confesó la autoría de los asesinatos ante la amenaza del Enterrador de matar a su hija Lenny. Spiderman, logró derrotar al villano, que estalló en las alcantarillas al haberse agotado la acción de la radiación gamma. Al poco llegó la policía, que le hizo escuchar la grabación que había hecho Spiderman y lo arrestaron. El ver como la consecuencia de sus actos ponía en peligro a su hija, que ignoraba totalmente las actividades ilegales de su padre, hizo que Forelli aceptara casi sumisamente el arresto {ASM2 53~ 54}.