Carol Danvers

Carol Danvers hizo carrera militar dentro de las fuerzas aéreas desde temprana edad. Cuando Apocalipsis conquistó Norteamérica durante la Ascensión, Danvers dedicó todos sus esfuerzos a enfrentarse a las fuerzas del tirano llegando a formar parte de la Liga de Defensa Humana. A través de este organismo se convirtió en la guardaespaldas de Pórtico, un mutante australiano que se dedicaba a recopilar el conocimiento humano {WX 3}.

Ante la amenaza que suponía Apocalipsis para el mundo, el Alto Consejo Humano decidió lanzar un ataque preventivo sobre Norteamérica empleando una flota de dirigibles, desafortunadamente, el sistema de guía fue destruido por Donald Pierce y sus Cosechadores. Por este motivo, Arma-X, un mutante de clase alfa que conocía a Danvers, fue en busca de Pórtico a Wundagore para intentar convencerle que supliera al sistema de guía perdido. Pierce reunió a tres cyborgs: Buitra, Mangle y Vigota, para atacar Wundagore. Si bien Arma-X y Carol Danvers lograron salvar la vida de Pórtico, el trío de mutantes se vio obligado a teleportarse dentro del bombardero que pilotaba Pierce para proseguir allí la lucha. A bordo del avión, Danvers se sacrificó arrojándose por la compuerta y arrastrando con ella a Pierce mientras hacía detonar una granada en mitad de la caída {WX 3}.

Pierce y Danvers sobrevivieron a la explosión. Recogiendo el cuerpo destrozado de la mujer, Pierce convirtió a Carol Danvers en un peligroso cyborg bajo su control. Junto a ella atacaron de nuevo la flota humana y alertaron de su proximidad a las fuerzas de Apocalipsis para que enviaran a interceptores contra los dirigibles. Mientras Pierce atacaba el mando de la nave, Carol Danvers intentó matar a Pórtico, pero Arma-X se lo impidió e incluso logró hacer que venciera temporalmente su programación. Entonces Pierce reapareció matando a Carol. Arma-X, aunque herido, logró acabar con él y permitir a Pórtico seguir guiando la nave para lanzar el ataque {WX 4}.