Bala de Cañón

Siniestro encontró a los tres hermanos Guthrie (Sam, Elizabeth y Paige), viviendo en la pobreza en las colinas de Kentucky. Mientras que los dos primeros aceptaron la tutoría de Siniestro y se convirtieron en miembros de la Fuerza Mutante de Élite, Paige se reveló y fue acogida por Coloso y Gata Sombra. Sam, bajo el nombre clave de Bala de Cañón y ostentando el cargo militar de torre de la FME, servía como guardia en los Corrales de Siniestro. Sam había sido adoctrinado según las creencias de Apocalipsis y creía firmemente en el sistema establecido. Por este motivo prefería a Kaos que a Cíclope, el líder de la FME, ya que consideraba que Cíclope era demasiado blando {FX 1}.

Cuando un grupo de mutantes liderados por la morlock Artemis intentaron fugarse de los Corrales, Sam y su hermana fueron recriminados por haber dejado que ocurriera algo así en su turno de vigilancia. Por orden de Kaos, rastrearon las cintas de seguridad descubriendo que un individuo dotado de un campo alterador para enmascarar su imagen había estado ayudando a los prisioneros a escapar. Viendo que Lorna Dane, una de las aún cautivas, podía haber identificado al intruso bajaron con Kaos a interrogarla. Como la chica se resistió la pusieron en manos de la Bestia para que la interrogara, pero Cíclope hizo que la devolvieran a los Corrales para respetar el Pacto Kelly que impedía las torturas {FX 2}.

Cuando Kaos descubrió que había sido su hermano Cíclope quien había ayudado a los prisioneros a escapar, entre ellos también a Lorna. Hizo que Sam y Elizabeth lo detuvieran junto a la recién capturada Jean Grey. Pero los dos mutantes alfa lograron escapar, así que Kaos ordenó a la FME que los apresara. Lo que no pudo prever era que los Hermanos Confusión, también miembros de la FME, se cambiaron de bando y decidieron ayudar a Cíclope y Jean deteniendo a los hermanos Guthrie {FX 3~ 4}.

Sam y su hermana no se encontraban en la lucha final que puso fin al reinado de Apocalipsis, pero tras la caída de este, se ocultaron para escapar de posibles represalias por parte del nuevo gobierno humano o para evitar ser cazados por Magneto y sus hombres X.

Sam, Elisabeth y su hermano Josh (cuyo grado de implicación en los crímenes durante el reinado de Apocalipsis es desconocido) se ocultaron durante un tiempo, hasta que oyeron rumores que su otra hermana, Paige, estaba viva y retenida en el Núcleo, la antigua central de energía que proveía de energía al Imperio de Apocalipsis situada en Pórtland, y que había sido abandonada por los siervos del tirano cuando estos supieron de su muerte.

Los Gurthie marcharon al Núcleo donde efectivamente, encontraron a Paige, encerrada y a punto de morir de hambre, Sam y sus hermanos la cuidaron y curaron hasta que se recuperó, podían haber seguido ocultos y tal vez con suerte, seguir vivos, pero Paige los convenció para que les ayudaran a vengarse de Magneto y sus hombres X por haberla abandonado.

Así, Paige se infiltró en la base de la Patrulla X bajo la identidad de Xorn, y pasado un tiempo, aprovechando que Magneto estaba en una misión en Méjico, decidieron llevar a cabo sus planes, mientras que Sam y sus hermanos creaban una diversión con un ataque contra Washington que sacó a la mayor parte del grupo de su base, Paige noqueaba a Picara y secuestraba a Charles, el hijo de Magneto.

Sam, Elisabeth y Josh se reunieron con Paige en la base de la Patrulla X, manteniendo a Charles como rehén, sin embargo este fue rescatado por Mariposa Mental, lo que auguraba un choque entre los Gurthie y la Patrulla X, sin embargo, este enfrentamiento no tuvo lugar, ya que se produjo el retorno de Magneto, furioso por el ataque contra su hijo.

Temerosos de la furia de Magneto, los Gurthie intentaron huir, pero no llegaron lejos, Magneto atrapó a Sam en una prisión de metal, y usó su poder para aplastarlo.