Richards, David

David Richards era un poderoso mutante, hijo de Franklin Richards y de Rachel Summers y por tanto nieto por parte de padre de Reed y Susan Richards, miembros de los 4 Fantásticos y nieto por parte de madre de Scott Summers y de Jean Grey, miembros ambos de la Patrulla X. Sin embargo, de nada le sirvió este impresionante árbol genealógico en una Tierra donde las autoridades humanas aprobaron la creación de los Centinelas, gigantescos robots cazadores de mutantes, después que se dictara el Acta de Restricción Mutante.

Tras un periodo en que solo los mutantes fueron perseguidos, encerrados y asesinados, los Centinelas pasaron a dar caza a cualquier ser con poderes para terminar capturando a cualquiera que mostrara anomalías genéticas que le hicieran propenso a conseguir super poderes, los mutantes y super hombres no estaban dispuestos a ir como corderos al matadero y se resistieron dando comienzo a una guerra que duró años pero que terminó con la victoria de la humanidad. ¿Victoria?, quizás hablar de victoria en un mundo que se había convertido en una zona de guerra arrasada, privado de plantas con el cielo oscurecido y con los Centinelas vigilantes como sabuesos era exagerar demasiado,

El hecho es que los abuelos del joven Richards habían muerto mucho tiempo antes, y sus padres murieron poco después de nacer él en cautiverio, de modo que David pasó sus primeros seis años de vida preso en un campo de prisioneros. Lo que los Centinelas desconocían, porque de otra manera sin duda lo hubieran ejecutado, es que David Richards una vez alcanzara la adolescencia, se convertiría en el mutante mas poderoso que hubiera pisado la Tierra 2600, una mezcla de Magneto, Profesor X y la Fuerza Fenix. Según el Tallus, David Richards estaba destinado a agrupar en torno a sí a la resistencia mutante contra los Centinelas y gracias a su enorme poder, destruirlos y llevar a su raza a la victoria, pero este destino tenía un lado amargo, debido a los años siendo testigo de torturas y muerte, años de castigo y prisión y viendo morir a sus seres queridos, provocarían que David se conviertera en una persona sin escrúpulos que terminaría esclavizando el planeta.

Dispuesto a evitar este futuro para la Tierra 2600, el Tallus envió a esta realidad no solo a uno sino a dos grupos de viajeros dimensionales, a los Exiliados y a Arma X comandado por Dientes de Sable, para que liberaran a David Richards, cosa fácil para el poder de ambos grupos combinados que rescataron no solo al joven Richards, sino también a mas de una docena de niños mutantes presos en el campo. Sin embargo, el Tallus no les había dicho la segunda parte de la misión, y es que debían asesinar al chico para evitar que se convirtiera en un dictador que dominara el planeta con mano de hierro, los miembros de Arma X no parecían tener ningún problema en perpetrar el asesinato pero los Exiliados no iban a permitir que asesinaran a un niño inocente por algo que todavía no había hecho, esta parecía ser la misma opinión de Dientes de Sable, antiguo mentor de Destello líder de los Exiliados y que se volvió contra sus compañeros uniéndose a su pupila lo que dio comienzo a una batalla entre ambos grupos con la vida de David en juego, batalla que se vio interrumpida por la llegada de un grupo de Centinelas clase Nimrod que obligó a ambos grupos a detener la batalla y huir por su vida, llevándose Arma X la peor parte y teniendo que ser rescatados por Destello.

Ya en lugar seguro y sin que Arma X tuviera intención de seguir combatiendo para asesinar a Richards, Dientes de Sable creyó haber alcanzado una solución que impediría el asesinato del niño, él se quedaría en la Tierra 2600 para educar al niño al igual que había hecho con Clarice, ayudándole a formar un ejército con el que oponerse a los Centinelas y asegurándose que no se convertiría en el dictador que el futuro le tenía reservado, tras esto, tanto Arma X como los Exiliados abandonaron esta realidad pensando que por primera vez en largo tiempo, la Tierra 2600 tenía un futuro esperanzador.

David y sus compañeros pasaron los años siguientes liderados por Dientes de Sable, aunque en sus primeros años apenas si podían hacer nada mas que correr y esconderse de los robots cazadores de mutantes. Sin embargo pasados unos años en que Dientes de Sable educó al chico y a sus compañeros llegando a quererlos como si fueran sus hijos, los niños empezaron a entrar en la pubertad y sus poderes empezaron a aumentar de potencia, lo que les permitía llevar a cabo contrataques, poco a poco Creed fue delegando en el chico, dándole mas confianza y cuando habían pasado aproximadamente veinte años desde que fue liberado de los campos, David había conseguido destruir la mayoría de las fábricas creadoras de Centinelas. Pero había algo que denotaba que el futuro predicho por el Tallus acechaba a Richards de manera inexorable, y es que el poderoso mutante encontró a un grupo de humanos los cuales resultaron estar al mando de los Centinelas y de las fábricas, orquestando todavía la caza de los mutantes.

Tal vez aquello se convirtió en el hecho diferencial, o tal vez David llevara en su interior el gen que le convertiría en un dictador genocida, pero el hecho es que encerró a los humanos en un bunker en Virginia Occidental a la espera de encargarse de ellos mas tarde y regresó junto a Creed y sus compañeros para planear el asalto final contra la última fábrica de Centinelas de toda América del Norte. En ese momento a la Tierra 2600 reapareció Destello que volvió a reunirse con su mentor, Dientes de Sable estaba eufórico por reunirse con Clarice pero David no confiaba en la aparición repentina de la mujer y la sometió a un examen telepático intrusivo y sin permiso que fue el primer síntoma de lo que debía venir.

Y es que tras la última batalla contra los Centinelas en que David enlazó mentalmente a todos los miembros de su grupo al tiempo que acababa con 84 Centinelas, David lanzó una proclama, tras tantos años de opresión, al día siguiente iban a acabar con sus opresores. Destello y Dientes de Sable pensaron que había mas robots ocultos pero el mutante se refería a sus prisioneros humanos y tras tomar el control telepático de Destell se dispuso a usar su poder para mostrarle a que se refería, Dientes de Sable intentó detenerlo, pero por primera vez en veinte años David no obedeció a su mentor y usando los poderes de Clarice, la llevó hasta el bunker de Virginia Occidental donde obligó a la chica a usar su poder para acabar con los prisioneros de manera horrible al tiempo que clamaba que este era el destino que le esperaba a la raza humana y que el destino de los mutantes eran gobernar el planeta.

Durante un par de días, David obligó a Destello a matar para él pero pasado ese tiempo, fueron localizados por Dientes de Sable, que usó un collar inhibidor para ocultar su presencia a su antiguo pupilo y tras acercarse lo suficiente, usó sus garras para arrancarle el corazón matándolo.