Josef Mengele

Mengele era el hijo de unos ricos industriales de la ciudad de Günzburg. Estudió Medicina y Antropología en las universidades de Múnich, Viena y Bonn y fue un acérrimo seguidor del partido nazi y llegó a formar parte de las SS. Durante la lucha en el frente ruso fue herido en una pierna y ascendido al rango de capitán. Tras conseguir el puesto como oficial médico del campo de concentración de Auschwitz, sus crueles experimentos le llevaron a ser apodado como el Angel de la Muerte.

La Lebengebrochennatch (la Noche de las Vidas Rotas) fue la noche a partir de la cual los nazis empezaron a dar caza a los mutantes, tal como ya habían hecho con los judíos. Josef Mengele creía que los órganos y los tejidos mutantes transplantados en la fisionomía humana podían ser la clave para crear una raza superior. Bajo el nombre clave del Proyecto: Grifo los científicos nazis implantaron corazones, pulmones y lóbulos frontales en humanos para determinar si podían aceptar los tejidos mutantes. La mayor parte de los pacientes murieron, pero Mengele tuvo éxito con un grupo de niños, los llamados Wenig Taktreisenders (Pequeños Viajeros Temporales) en quienes había implantado con éxito la capacidad para teleportarse. Hitler, en cambio, los consideró un peligro potencial, ya que un teleportador podía vaciar un campo de concentración o teleportarse hasta su dormitorio y matarlo. Por este motivo Mengele ordenó su destrucción, pero justo cuando iban a ejecutarlos los aliados irrumpieron en el laboratorio y lograron rescatarlos con vida {SM&BC:ETMD 5}.

Pese a las atrocidades cometidas durante la guerra, Mengele logró huir a Paraguay dejando a su esposa Irene atrás. Tras divorciarse de ella por correspondencia terminó casándose con Maria Martha Will, la esposa de su hermano Karl cuando éste falleció. Adoptando varias identidades falsas logró escapar de los cazadores de nazis y del Mossad. Finalmente murió en 1979 en extrañas circunstancias.