Tierra-97193

La Tierra-97193 es una realidad divergente de la Tierra-616, las dos tienen en el mismo pasado en común hasta que un suceso concreto provoca que el destino sea diferente. En ambas Tierras, el hombre-X conocido como Lobezno marchó junto a sus compañeros de la Patrulla-X hasta el Asteroide M para combatir a Magneto. En el espacio, Lobezno fue presa fácil del Amo del Magnetismo que usó su poder para extraer el adamantium del cuerpo de Logan a través de los poros de su piel. El trauma sufrido provocó un daño tanto físico como mental a Lobezno, pero en la Tierra-616 Logan logró recuperarse recuperando la normalidad. En la Tierra-97193 en cambio, el daño sufrido por Lobezno fue tal que poco a poco fue perdiendo la razón, volviéndose salvaje hasta que pasado un tiempo era ya incapaz de articular palabra, reconocer a nadie o incluso tener un pensamiento coherente. Habían pasado diez años tras la lucha de Magneto contra la Patrulla-X, Logan se dedicó a vagar por los bosques en estado salvaje sin ningún rastro de su pasada humanidad. Los amigos de Logan enviaron a Cable tras Lobezno.

El plan era que Cable capturara a Lobezno con el menor daño posible, pero Nathan tenia un concepto diferente a capturar a alguien sin sufrir daño, usando un proyector de hologramas, Cable llamó la atención de Lobezno con imágenes del pasado de Logan y mientras estaba distraído intentó capturarlo con redes electrificadas pero el estado salvaje de Logan era tal que incluso de esta celada escapó. Decidido a acabar con el cazador que iba tras de él, Lobezno tendió a su perseguidor una rudimentaria celada que apunto estuvo de acabar con Nathan. Revisando la bolsa que Cable había dejado tras de sí, Logan encontró un objeto metálico y cuando lo tocó, este se cerró en torno a su mano. Aparecieron entonces imágenes holográficas de Jean Grey y Júbilo que intentaban que Logan recordara su pasado, por un momento parecía que Logan recordaba algo, pero entonces olió la llegada de Cable y de nuevo su instinto animal dominó su mente salvaje y su sentido de auto protección le impelía a escapar perdiéndose la mejor oportunidad de recuperar la cordura. Como un lobo atrapado, Lobezno se cortó la mano y huyó del lugar escapando finalmente perdiéndose el rastro para siempre.