Harokin

Harokin era el jefe de una horda de bárbaros que habitaban en Asgard. Tras hacerse con el Ojo del Warlock, Harokin y sus guerreros asediaron la ciudad cerca de Muspelheim, que cayó indefensa ante los guerreros de Harokin y el objeto místico. Odín envió a Thor y a los Tres Guerreros en busca del Ojo, pero cuando llegaron la ciudad ya había caído. Thor y sus aliados entraron en la ciudad de manera furtiva y mientras Hogun y Fandral mantenían a raya a los guerreros de Harokin, Volstagg lograba descubrir el lugar donde se escondía el Ojo del Warlock y Thor se enfrentaba en combate personal contra Harokin, al que logró derrotar, pese a ser enemigos, Thor reconoció en el bárbaro a un enemigo honorable. Lo que Thor no sabía era que Harokin había sufrido graves heridas en combates anteriores y que el combate contra el Hijo de Odín le había dejado gravemente malherido. Mientras el jefe de las hordas bárbaras yacía herido, Thor, dándose cuenta que su aspecto y el de Harokin era muy similar, ocupó el puesto del líder de los bárbaros, salvando a sus compañeros y usando el Ojo del Warlock para rendir a las fuerzas invasoras. Una vez liberada la ciudad, Thor fue a ver a Harokin pero este no había mejorado de sus heridas, poco después llegaba a la ciudad un corcel enviado por Hela, la Diosa de la Muerte, para llevarse al valeroso guerrero. Harokin se enfrentó valientemente a su destino y la propia Hela, escoltada por su guardia real de valkirias, escoltó al guerrero hasta el Valhala, donde se unió al resto de valerosos guerreros muertos en combate para vivir una vida eterna de lucha y aventuras, convirtiéndose pronto en líder de los Einherjar, los guerreros del Valhalla.

Los caminos de Thor y Harokin volvieron a cruzarse cuando el Dios del Trueno marchó al reino de la muerte mientras buscaba a su perdido padre, Harokin y sus guerreros no podían permitir que un asgardiano todavía vivo como era el caso de Thor, pusiera un pie en Valhala y se enfrentaron a él liderados por Harokin, tal vez las incontables legiones del Valhala hubieran rendido al hijo de Odín pero la aparición de Hela, que aseguró a Thor que Odín no estaba en su reino, puso fin al combate.

Tiempo más tarde, Hela concedió a Harokin y sus guerreros la oportunidad de librar un nuevo combate, conquistando Valhalla y anexionándolo al reino de la muerte. Frente a ellos se alzaron las guerreras de Odín, las Valkirias, pero Hela había dado a Harokin un poder que le permitía convocar los espíritus de los caídos lo que le permitió alzar un enorme ejército con el que derrotó a las valkirias. Solo la llegada del propio Odín obligó a Harokin y las huestes de Hela a retirarse del Valhalla.

Cuando el reino dorado se vio amenazado por las fuerzas de Surtur, Odín convocó en ayuda de Asgard a todos los defensores del Reino, entre ellos estaban Harokin y sus Einherjar. Harokin luchó junto al resto de los asgardianos contra los demonios llameantes de Surtur en la Tierra, los Einherjar lucharon valientemente junto al resto de los asgardianos y junto a los héroes de la Tierra así como sus ejércitos, finalmente Harokin lideró una última carga mediante la cual pudieron atrapar al grueso de las fuerzas enemigas, esto, junto a la derrota de Surtur en Asgard, dio la victoria a Harokin y las fuerzas de Asgard.

Harokin regresó a Asgard (portando como recuerdo unas ametralladoras cortesía del ejército de los Estados Unidos),donde le esperaba la noticia de la desaparición y mas que probable muerte de Odín, su hijo Thor reclutó voluntarios para marchar al Reino de la Muerte con la intención de liberar a unas almas de inocentes mortales que Hela había capturado, Harokin y sus Einherjar se unieron a Thor y a otros guerreros en su viaje al Reino de la Muerte donde hubieron de luchar contra el ejército de muertos de Hela, en un combate del que apenas lograron sobrevivir escapando de Hel gracias al sacrificio de Skurge, al que Harokin entregó sus armas traídas desde la Tierra para que detuviera al ejército de los muertos mientras los asgardianos escapaban. Thor marchó a la Tierra para devolver las almas robadas por Hela y allí fue víctima de un hechizo urdido por Loki que lo convirtió en rana, el hermanastro de Thor pretendía de esta manera alejar a Thor de Asgard mientras tenía lugar la elección del nuevo soberano del reino dorado. En ausencia del Dios del Trueno, Loki había maquinado para ser él el elegido. Los amigos de Thor sin embargo, no podían permitir que el malvado Loki se hiciera con el trono de Asgard y aprovechando la semejanza entre Harokin y Thor, disfrazaron al líder de los Einherjar como si fuerza el Dios del Trueno retrasando de este modo la elección del nuevo soberano. Esta suplantación fue descubierta por Loki que planeaba sacarla la luz el día de la proclamación del nuevo monarca, pero entonces apareció el verdadero Thor que obligó a Loki a devolverle a la normalidad y a abortar sus planes, siendo elegido Balder como nuevo soberano de Asgard.

Harokin regresó al Valhala donde continuó su vida como guerrero luchando en combates y aventuras, solamente interrumpido en ocasiones como cuando Odín visió el Valhala en busca de un sustituto para Thor, el cual distraído con sus asuntos en la Tierra había perdido la confianza de Odín. Harokin albergaba la esperanza de ser él el elegido por Odín pero este se decantó finalmente por Red Norvell.

Tiempo más tarde, cuando Loki se hizo con el molde a partir del cual se fabricó el Mjolnir, y tras resucitar a Surtur para que forjara cientos de martillos para su ejército, Harokin y el resto de asgardianos como Loki lanzaba un feroz ataque sobre Asgard. Pese a que los asgardianos lucharon valientemente liderados por Balder y Harokin, no pudieron impedir que los atacantes los diezmaran. Solo la oportuna llegada de Thor provocó la huida de Loki y sus aliados pero era demasiado tarde para Balder que había caído abatido. Harokin y sus guerreros se unieron a Thor y los supervivientes de Asgard en una larga y penosa marcha en dirección a Valhala donde pretendían presentar una última resistencia. El viaje no estaba exento de peligros y en su camino se encontraron al villano conocido como la Llama, que estaba sembrando estragos en los campos asgardianos. Harokin y sus guerreros se enfrentaron a la Llama y finalmente Harokin logró matar a su enemigo atravesándole con su propia espada, sin embargo, sus heridas eran demasiado grandes y Harokin falleció finalmente. Se ignora si Harokin se encontraba entre los asgardianos que Thor devolvió a la vida después del Ragnarok.