Kassar

Kassar era un mercader de lana que comerciaba a menudo en Wan Tengri, una ciudad de Khitai controlada por los Siete Magos. Un día Conan contactó con él y le ofreció dinero para ayudarlo a entrar en la ciudad y sortear a los guardias de la puerta de entrada. Conan había sido enviado por el Comandante Narim-Bey para espiar la ciudad. Al verlo llegar con su carreta de lana, el guardia de la puerta desconfió de su cargamento y hundió su lanza varias veces en él. Afortunadamente aunque la última estocada hirió levemente a Conan este no soltó ni un quejido y no fueron descubiertos. Ya dentro de las murallas se separaron y Kassar recomendó a Conan ir a ver a Tsien Hui {CTB 32}.

Pero Conan fue descubierto por los guardias y también Kassar, quien fue llevado prisionero a la torre donde vivían los magos. Al enterarse Conan quiso ir a rescatarlo, ya que no quería que nadie muriera en su nombre, pero llegó tarde y encontró a Kassar muerto y atado a un altar de sacrificio {CTB 33}. No está claro quien, si un mago o la Princesa que era prisionera en la torre, usó el cuerpo de Kassar para animarlo y crear la ilusión que era una mujer con el rostro de calavera. Aunque esta ilusión intentó doblegar la voluntad de Conan no lo logró y cuando se repuso, el cuerpo volvió a desplomarse al suelo revelando que era el cadáver de Kassar {CTB 34}.