K.O Rigoletto

K.O Rigoletto era el dueño del gimnasio donde entrenaba Batallador Jack Murdock, un boxeador de segunda fila que llegó a hacerse gran amigo de K.O. Es por ello que Rigoletto intentó prevenir a Murdock acerca de hacer tratos con Roscoe Sweeney, alias el Arreglador, ya que distaba mucho de ser un buen manager y era solo un bandido. Pese a las advertencias de su amigo, Murdock acabó acudiendo al Arreglador, que le aceptó como pupilo logrando que combatiera en una serie de peleas que le catapultaron a lo alto, pero obligándole a perder cuando le tocó luchar en un combate donde se movía mucho dinero. Los años siguientes fueron un desastre para Murdock, y K.O vio apesadumbrado como su viejo amigo recibía paliza tras paliza hasta que un mal golpe le dejó en coma.

El hijo de Jack, Matt, intentó hacerse boxeador para pagar las facturas del hospital, en un principio K.O se negó ya que su amigo nunca había querido que su hijo se dedicara a pelear y porque creía que Matt era ciego, pero el joven Murdock lo impresionó gracias a sus habilidades (adquiridas tras verse expuesto a ciertos productos químicos) y acabó aceptándolo. Pero Rigoletto tenía sus propios problemas, en concreto un nuevo criminal llamado Willson Fisk que buscaba hacerse un hueco en el hampa de la ciudad, y que cobraba a negocios como el de K.O a cambio de darles protección. Fisk visitó a Rigoletto y cuando este le dijo que no podía pagar, el criminal se fijó en el joven Murdock e hizo un cambio, perdonaría la deuda a K.O a cambio que Matt se convirtiera en su pupilo. Atrapado, Rigoletto aceptó aunque con la esperanza que Matt se negara, pero este, para desesperación de K.O, aceptó combatir para Kingpin pasando a encontrarse bajo la tutela de este.

Desde la marcha de Matt no han vuelto a tenerse noticias de K.O Rigoletto.