Magos blancos

Los Magos Blancos era un grupo reunido por el Anciano y que incluía, contándolo a él, a los nueve magos mas poderosos de la Tierra, para enfrentarse a la amenaza de Dormammu el cual había logrado captar para su causa a los dos adeptos mas poderosos para la magia, el Barón Mordo y Stephen Extraño. Si Dormammu ya era poderoso con el poder de un Dios a su disposición, con la ayuda de Extraño y Mordo la amenaza podía ser definitiva. Algunos de los allí reunidos, como el Doctor Druida, temían no tener poder suficiente para repeler el ataque y el Anciano les habló del Ojo de Agamotto y sus cualidades no solo como artefacto místico sino también como portal al reino de Eternidad. Las palabras del Anciano calaron en la mente del Doctor Druida, que fantaseó con la posibilidad de pedir ayuda a Eternidad en la lucha contra Dormammu, esta fantasía pareció hacerse realidad cuando el poderoso Genghis descubrió un hechizo que debía permitir convocar a dicho ente cósmico.

Poco después, los espectros al servicio de Dormammu descubrieron el aquelarre de magos reunidos en el Templo del Anciano y Extraño fue enviado al frente de un ejército de espectros para acabar con el Anciano y sus aliados, los Magos Blancos se defendieron alzando un escudo de luz para defenderse, sin embargo en medio de la batalla, Genghis y el Doctor Druida decidieron llevar a cabo su propio plan usando el Ojo de Agamotto para convocar a Eternidad, las cosas no salieron como los magos habían previsto y se alzó un torbellino que arrastró al interior del Ojo de Agamotto entre otros a los Espectros, al propio Extraño y a Genghos. Encerrado en una dimensión extraña y desconocida, Extraño vagó sin rumbo hasta que encontró al propio Eternidad que le juzgó como malvado e insignificante devolviéndole a la Tierra.

Con la vuelta de Stephen, un nuevo ataque era inminente y ahora los Magos Blancos estaban debilitados por la pérdida de Genghis, por lo que decidieron usar a sus adeptos, Wong, Victoria Bentley y Hamir para usarlos como portavoces de los Vishanti y pedirles consejo. Estos le dijeron que enviara el Ojo de Agamotto a Extraño, así lo hicieron y el siervo de Dormammu adquirió un arma de enorme poder para su ataque contra los magos blancos que una vez mas alzaron un escudo pero esta vez fue facilmente destruido por Extraño.

Con sus aliados caídos, el Anciano se alzó ante Stephen que vio como a su enemigo le rodeaba un aura de bondad sin igual, furioso, lanzó una última acometida que derrotó al Anciano y tras esto abrió un portal hasta el reino de Eternidad dispuesto a enfrentarse a este. Sin embargo, llegado el momento, Stephen hubo de decidir de continuar al servicio del mal siguiendo a Dormammu o aceptar el camino del bien, como había podido ver en el Anciano, tras unos angustiosos segundos, Extraño aceptó seguir a las fuerzas del bien y tras abandonar a Dormammu se convirtió en nuevo discípulo del Anciano. No se han vuelto a tener noticias de los Magos Blancos como grupo desde entonces.