Kraal

Poco se sabe del pasado del joven mutante conocido como Kraal, mas que ingresó en la War Watch, la milicia creada para vigilar el posible retorno de Guerra, el Gran Enemigo del pasado que logró aglutinar los esfuerzos de todos los países en un objetivo común acabando con todas las guerras, la delincuencia, hambruna y enfermedades. Viviendo en un mundo en que humanos y mutantes eran tratados por igual, Kraal tenía en su compañera Amber a su mejor amiga, pero con el paso del tiempo y ante la falta de delincuencia Kraal llegó a plantearse si tenía sentido seguir perteneciendo a la War Watch, máxime porque hacía casi un siglo que no se tenían noticias del Gran Enemigo.

Kraal marchó a la Bahía de Hudson, donde la War Watch tenía un campo en que sus miembros podían relajarse y dedicarse a la meditación, allí conoció al Hermano Xavier y le hizo partícipe de sus dudas. Irónicamente, el Hermano Xavier era en realidad Lobezno, el mutante que tras ser manipulado por Apocalipsis se había transformado en Guerra y que tras largo tiempo de esclavitud había logrado imponer su voluntad recuperando la normalidad. Kraal escuchó del Hermano Xavier hablar del pasado, como la presencia del Gran Enemigo sumió a la Tierra en una época de locura y falta de paz y que ahora que la habían logrado, debían hacer todo lo posible por mantenerla.

Con fuerzas renovadas Kraal regresó a la actividad y junto a Amber se enfrentó a unos alborotadores adoradores de Guerra que sembraban el terror en la ciudad. Superiores en números, estos alborotadores amenazaban con matar a Kraal y sus compañeros, pero quiso el destino que el Hermano Xavier estuviera cerca del lugar y ayudó a la War Watch a derrotar a los alborotadores, enfrentándose a su líder contra quién desenvainó sus garras, este, furioso por lo que consideraba una burda imitación de su señor, le atacó con un arma destripándolo. El Hermano Xavier fue trasladado en ambulancia para ser tratado de sus heridas, aunque los médicos le daban pocas esperanzas de sobrevivir, sin embargo el factor de curación del mutante no tardó en actuar curando sus heridas y permitiendo al mutante marchar.

Esto acabó de convencer a Kraal que su amigo era en realidad Guerra e inspirado no por este, sino por las enseñanzas del Hermano Xavier, abandonó el servicio activo trasladándose al Campo enla Bahía de Hudson donde ayudó a aquellos que como él, hubieran tenido una crisis de fe, a recuperar la motivación.