Zaladane

La mujer llamada Zaladane aseguraba que su nombre real era Zala Dane declarándose como la hermana de Lorna Dane, la mutante que formó parte de Factor-X bajo el sobrenombre de Polaris. Pese a todo tales afirmaciones parecen carecer de fundamento y podrían haber sido tan sólo un ardid para desconcertar a su víctima.

Zaladane habitaba en la Tierra Salvaje, una tierra escondida en la Antártida sumida aún en la prehistoria, aunque se desconocen las causas que la condujeron hasta ahí, así como el modo en el que llegó a erigirse sacerdotisa del Pueblo de Sol, una de las muchas etnias que habitan en la Tierra Salvaje.

Zaladane era la suma sacertotisa del culto de Garrok, el dios solar adorado por el Pueblo del Sol. Bajo su liderazgo guió a su pueblo a la guerra en nombre de Garrok con la intención de conquistar más terreno de la Tierra Salvaje. Sin embargo, un marinero británico quinientos años antes había descubierto la Tierra Salvaje y bebió un extraño líquido que le confirió poderes sobrehumanos y la inmortalidad. Con el pasar del tiempo fue adquiriendo lentamente la apariencia rocosa del dios Garokk. Regresando a la Tierra Salvaje se proclamó él mismo como la encarnación del dios e hizo uso de sus poderes para destruir las armas del ejército de Zaladane concluyendo de esta forma la guerra. Poco después el marinero murió inmerso en el líquido que le había dado sus poderes.

Algunos meses después, capturó a un hombre llamado Kirk Marston, que pintó con aceite confeccionado a partir de las cenizas del marinero que asumió la identidad de Garokk. A consecuencia de ello Marston se transformó en la nueva encarnación del dios petrificado. Bajo la guía de Zaladane se construyó una ciudad en el centro del lago más grande de la Tierra Salvaje. Garokk y Zaladane gobernaban con mano tiránica y mataban a todos sus oponentes. Además, a consecuencia de la ciudad, el delicado equilibrio ecológico de la Tierra Salvaje empezó a deteriorarse por lo que peligraba la supervivencia de este reino escondido. La intervención de la Patrulla-X y Ka-Zar desbarataron los planes de Zaladane que se vio obligada a huir. Garokk no tuvo tanta suerte y a consecuencia de su enfrentamiento contra Cíclope cayó en un profundo pozo sobre el que se desplomó la entera ciudad {UX 115~ 116}.

Años más tarde, Zaladane se convirtió en la ayudante el Alto Evolucionador en su esfuerzo por restaurar la tierra salvaje después de haber sido destruida por Términus. Zaladane se alió con los Neomutantes de la Tierra Salvaje. Siguiendo los planes del Alto Evolucionador Zaladane reunió un ejército de nativos que habían sido controlados mentalmente por Gusano, uno de los Neomutantes. Zaladane entonces capturó a su hermana Lorna, que se encontraba poseída por Malicia. Utilizando las máquinas del Alto Evolucionador transfirió los poderes magnéticos de su hermana a su cuerpo, pero el proceso confirió superfuerza a Lorna y la liberó del control de la Merodeadora. Las maquinaciones de Zaladane fueron destruidas por la intervención de Ka-Zar y la Patrulla-X. Tras derrotar a Zaladane, Kaos destruyó la fortaleza del Alto Evolucionador desde la que operaba con sus rayos cósmicos {UXM~UXM}.

Meses más tarde, todavía al mando de los Neomutantes intentó controlar las fuerzas magnéticas de toda la Tierra. La amenaza internacional que eso suponía provocó la intervención de Nick Furia en persona al mando de un comando de SHIELD. En la Tierra Salvaje se encontraban también Magneto y Pícara, que se estaba reponiendo de su reciente aparición del Lugar Peligroso. Furia, Magneto, Pícara y Ka-Zar aunaron fuerzas para enfrentarse a Zaladane. Finalmente se produjo un violento enfrentamiento entre Zaladane y Magneto, el Amo del Magnetismo. El veterano mutante consiguió vencer a Zaladane a quien traspasó con múltiples lanzas de metralla matándola para impedir que algún día se repusiera de la derrota.