Enclave

El Enclave fue fundado por cuatro científicos, cada uno de ellos experto en diferentes áreas. Maris Morlak, un físico nuclear lituano; Jerome Hamilton, un biólogo médico americano; Carlo Zota: un técnico en electrónico español y Wladyslav Shinski un genecista polaco, que estudió genética con el experto inhumano de nombre Phaedar, y tuvo como alumno a Armin Zola.

Los cuatro se encontraron en una convención de científicos y descubrieron que tenían una visión del mundo y las soluciones que debían adoptarse muy similares, por ello todos decidieron dedicar sus recursos económicos para crear una comunidad científica independiente. Pasado un año de esta primera reunión, los cuatro científicos habían fingido sus muertes, y se habían reunido en una en una pequeña isla en el Atlántico Norte.

En esta isla sin nombre, un amigo de Hamilton, el arqueólogo Daniel Damian, había descubierto las ruinas de una civilización tecnológicamente muy avanzada (los Desviantes), y le había indicado a Hamilton la ubicación de dicha isla.

Los cuatro miembros del Enclave, usaron el metal que encontraron en la isla para crear su propia ciudadela científica, que bautizaron como "la Colmena". Después de una década de trabajo, la Colmena estaba plenamente operativa, y se convirtió en el lugar donde se crearon gran número de maravillas científicas, rivalizando con la Montaña Wundargore del Alto Evolucionador, el Castillo en Suiza de Armin Zola, el laboratorio de Maelstrom en el Atlántico, o la Isla de Centurius en el Pacífico. Trabajando juntos, y usando la tecnología abandonada de la isla, el Enclave creó avanzados logros tecnológicos, como aparatos anti gravedad, máquinas teleportadoras

Pero el campo en el que el Enclave puso sus esperanzas para lograr sus objetivos fue en el campo de la genética. El plan del Enclave era crear una numerosa y poderosa raza de seres humanos que estarían bajo su control, y con la subyugarían al resto de la humanidad. Durante una década, los cuatro científicos trabajaron, modificando las moléculas de DNA humano mediante bioingeniería, para crear vida. Tras esto la irradiaron con varios tipos de energía para fortalecerla y darles poder, y tras esto aceleraron su crecimiento. Sin embargo, cuando su prototipo alcanzó la madurez, escapó de la cámara de incubación debido a sus ansias de libertad. Debido a su rápida maduración, el Enclave no pudo colocar las salvaguardas que debían privarle de la individualidad y el deseo de libertad, y que hubiera permitido al Enclave controlarle. La criatura, a la que se referían únicamente con el nombre de El, manifestó poderes de manipulación energética, y demostró la capacidad de volar.

Antes, Hamilton había utilizado la máquina de teleportación para secuestrar a la escultora ciega Alicia Masters, y la llevó a la Colmena para que esculpiera el rostro que "El" debía llevar. En el último momento, Hamilton sintió remordimientos de conciencia, y tras convencer a Alicia de que hiciera lo que ellos querían, entró junto con la escultora a la cámara donde "El" se encontraba. Al mismo tiempo, los amigos de Alicia Masters, los 4 Fantásticos, la creían desaparecida y secuestrada, y siguieron su pista hasta la Colmena. Tras rescatar a Alicia, los 4 Fantásticos y la escultora escaparon a través de la máquina de teleportación, dejando atrás a un fallecido Hamilton, que murió en un corrimiento de tierra provocado por uno de los rayos de "El".

Zota advirtió a "El" que si seguía lanzando rayos discriminadamente, podía causar la destrucción de toda la Colmena, conmocionado por la destrucción que había causado y ante el aviso de Zota, "El" creyó que era el demonio, y voló lejos de la isla, mas tarde "El" sería conocido como Adam Warlock. La Colmena había resultado gravemente dañada durante la primera demostración de los poderes de "El", pero no había sido completamente destruida, ni tampoco Shinski, Zota y Morlak habían muerto, como El creía. El Enclave había perdido a la mayoría de los mercenarios que utilizaban como guardias, pero aun así comenzaron la reconstrucción de las instalaciones. Cuando la hubieron terminado, se dispusieron a llevar a cabo su segundo experimento genético, que era un duplicado de su primer intento con "El", y que esta vez esperaban mantener bajo control.

Cuando esta segunda criatura alcanzó la madurez, el Enclave, pidió ayuda al Doctor Extraño para que usara un láser controlado por control remoto, para modificar el emergente cerebro de la criatura para asegurarse que les obedecería. A pesar de sus esfuerzos, la criatura tuvo consciencia de su existencia al poco tiempo, y emergió del capullo en el cual se estaba incubando, y desprendió suficiente energía como para hundir la isla del Enclave bajo las aguas del Atlántico. La criatura, que se autodenominó Paragon,creó un nuevo capullo para ella, en el que se encerró para completar su transformación y cuando finalmente emergió, tomó el nombre de Ella.

Los tres miembros supervivientes del Enclave marcharon a Europa, donde instalaron temporalmente sus cuarteles. Adquirieron fondos mediante la venta de cierta tecnología a HYDRA, el Enclave ayudó a financiar el Security College, una institución creada para albergar a los hijos de embajadores, políticos e importantes industriales, donde aparentemente se les dotaba de la mejor educación. En realidad, el Enclave pretendía adquirir secretos industriales, militares y políticos. Para lograrlo, el Enclave contrató al Monóculo, un alemán que inventó un aparato para controlar los cerebros de las personas que vivían en la institución. Una de las personas que se encontraban en esta institución era la Antorcha Humana, que también cayó bajo el control del Monóculo. Storm, junto a los demás estudiantes, obedeció las órdenes del Monóculo, y robó material del ejército. Tras esto, el Enclave decidió poner fin a su proyecto del Segurity College, ya que lo consideraba un riesgo excesivo, cuando el Monóculo se negó a abandonar el proyecto, y su plan fue descubierto gracias a la intervención de Spiderman, el Enclave detonó la nave en que escapaba el alemán, el cual murió aparentemente.

Utilizando una variante de su máquina teleportadora, el Enclave secuestró a Medusa, de la familia Real de los Inhumanos, con el fin de usarla como rehén. Poco tiempo después el Enclave lanzaba el primero de sus ataques contra la Ciudadela de los Inhumanos en el Himalaya, usando a mercenarios como su ejército particular. El Enclave fue ayudado en sus planes por el Inhumano renegado Maximus el loco, el cual saboteó los sistemas de defensa de su propia gente, y permitiendo que sus camaradas Inhumanos enfermaran acerca de la polución de la Tierra. La batalla terminó cuando Maximus traicionó al Enclave, y volviendo el armamento del Enclave contra ellos. Una vez acabada la batalla, Medusa fue liberada en el proceso. Ninguno de los miembros principales del Enclave fue capturado en esta ocasión, solamente lo fueron los mercenarios. Al poco tiempo, el Enclave volvió a ponerse en contacto con Maximus, y volvieron a lanzar un ataque contra los Inhumanos y su Gran Refugio, el cual se encontraba esta vez en la Luna, a la que se habían trasladado escapando de la polución en la Tierra. El ataque contra los Inhumanos fue mas sibilino que el anterior, ya que Maximus había conseguido poseer el cuerpo de su hermano Rayo Negro, y de esta manera permitió a las tropas del Enclave infiltrarse en terrenos de los Inhumanos.

Desde la Luna, el Enclave utilizó su tecnología para lanzar una lluvia de meteoritos contra la Tierra. Su plan falló debido a la intervención de los Vengadores, y por primera vez, dos de los miembros del Enclave, Zota y Morlak, fueron capturados, entregados a las autoridades y puestos bajo custodia, el tercer miembro del Enclave, Shinski, que decidió no viajar a la Luna, quedó en libertad. Shinski consiguió reunir la tecnología suficiente para construir una máquina teleportadora, con la que consiguió liberar a sus dos compañeros de prisión.

Los tres miembros del Enclave se disponían a coger una avioneta para trasldarse a su nueva base, cuando fueron detectados por las autoridades del aeropuerto, en su intento de escapar sufrieron un accidente de aviación, del que sufrieron múltiples heridas, y tras el cual fueron hospitalizados, y posteriormente llevados a prisión. Los miembros del Enclave lograron escapar, aunque no reemprendieron ninguna actividad importante durante un tiempo. Mas tarde, se aliaron con los fabricantes de armas de alta tecnología conocidos como IMA, que les proporcionaron material y un ayudante a cambio de que les proporcionaran resultados similares a los de su primer experimento.

No siendo capaces de repetir el éxito de su primer descubrimiento, y dado que un Shinsky ya envejecido quería ver a Parangón, a la que consideraba una hija, decidieron capturarla. El Enclave robó del Proyecto: Pegaso el capullo en que Parangón se encontraba recobrándose de sus heridas, y lo abrieron parcialmente, intentando razonar con Parangon (ahora conocida como Kismet), explicándoles su situación, y como Shinsky necesitaba su ayuda. Sintiendo compasión por su creador, les dejo coger una muestra de su material genético para mediante ella, salvarle la vida a Shinsky. Sin embargo, el ayudante enviado por IMA, al ver que el Enclave iba a utilizar ese material para ayudar a Shinsky en vez de dárselo a sus jefes, tiroteó a los miembros del Enclave hiriéndolos.

Entonces Kismet emergió del capullo dispuesta a vengar al asesino de sus "padres", pero entonces el ayudante mostró que en realidad era un robot adaptoide, y que había copiado los poderes y habilidades de Kismet, transformándose en una réplica de ella como Parangón. Sin embargo Kismet logró derrotar al robot, debido al escaso control sobre sus habilidades que este tenía. Tras esto, sintiendo lástima por sus creadores, y sintiendo que era su deber salvarlos, les infundió parte de su energía, encerrándoles en capullos curativos mientras vigilaba su recuperación.

Un tiempo después, los capullos eclosionaron, y los tres componentes del Enclave surgieron transformados en seres que metabolizaban energía cósmica, al igual que hacía Kismet, aunque pronto descubrieron que no podían alejarse unos de otros al haberse unido sus fuerzas vitales. Juntos, el Enclave y Kismet, partieron hacia el espacio, donde permanecieron un tiempo explorando el Universo. Pasado un tiempo, los miembros del Enclave revirtieron a sus cuerpos humanos, sanos completamente, y regresaron a la Tierra.

Reemprendiendo sus planes de conquistar el mundo para mejorarlo, diseñaron un Bio-Modem que les permitiría imprimir órdenes en la mente de los humanos, pudiendo así controlarlos. Para conseguir un elemento que necesitaban para su máquina, hubieron de robar en Industrias Micron, y para ello crearon un robot similar a Spiderman, logrando así que cuando se descubriera el robo, se culpara al arácnido. Tras una pelea inicial, Spiderman y el nuevo equipo de héroes, los Thunderbolts se aliaron para detener al Enclave.

En circunstancias desconocidas, Shinsky viajó a Latveria, donde tras un encuentro con los monjes que entrenaron en el pasado al Doctor Muerte, se convirtió en algo muy similar a él, Crisol. Su primer objetivo fue el archienenemigo de Muerte, Reed Richards, a quién atacó en una convención en Londres usando un aparato para robar su inteligencia. Pese a que el aparato funcionó, Crisol fue derrotado y obligado a huir. Poco después Crisol invadió Genosha con la ayuda de Morlack, que también adoptó la identidad y personalidad de Crisol, y creando un nuevo ser basado en Kismet, Ayesha. Los 4 Fantásticos atacaron Genosha para liberarla de Crisol, y lograron derrotarle, recuperando así la inteligencia de Richards, durante la batalla, aparentemente uno de los miembros del Enclave mató al otro antes de huir. Se desconoce porque Zota no actuó junto a sus compañeros en esta ocasión, ni el verdadero destino de Shinsky y Morlack.