Corona Cobra

Tras suceder el Gran Cataclismo que destruyó Atlantis, la humanidad entró en la Era Hyborea. Durante esta época los seguidores de Set se instalaron en la región conocida como Estigia, que actualmente se conoce como Egipto. Los magos de Estigia que trabajaban para Set, practicaban la magia negra, y el mayor, más poderoso y más peligroso de sus magos era Toth-Amon. Toth-Amon entró en posesión de un artefacto conocido como la Corona Cobra, una réplica de la Corona Serpiente, probablemente creada a imitación de esta, que aun estaba perdida. Al igual que ésta, dotaba de poderes mentales a su poseedor.

Toth-Amon intentó usar la Corona Cobra para poner a miles de personas bajo su control mental, para convertirlos en un ejército conquistador. Toth-Amon forjó una alianza con el Duque Villagro, el cual esperaba reemplazar al rey Ferdrugo, monarca del reino de Zingara. Sin embargo, Toth-Amon formuló un hechizo que colocó a Ferdrugo bajo su control mental, y le obligó a colocar al reino de Zingara bajo su poder. Enfurecido, Villagro cogió la Corona Cobra y se la puso y volcó su poder contra Toth-Amon. Como Villagro era inexperto en el uso del poder místico, Toth Amon fue capaz de resistir el ataque de Villagro gracias a su propio poder.

Ayudado por Menkara, una sacerdotisa de Set, Toth-Amon derrotó a Villagro, sin embargo, distraído por el combate con su enemigo, Toth-Amon perdió el control sobre la mente de Ferdrugo. Tras derrotar a Villagro, Toth-Amon recuperó la Corona Cobra, sólo para descubrir que esta había perdido parte de su poder debido al uso que Villagro le había dado, y el mago hubo de hacer frente a un enfurecido Ferdrugo sin la ayuda de la Corona mística. El archienemigo de Toth-Amon, Conan de Cimmeria el mayor guerrero de la época, acudió con su ejército en ayuda de Ferdrugo cuando este combatía contra las tropas de Toth-Amon, con la ayuda de Conan, Ferdrugo y sus tropas lograron derrotar a Toth-Amon y a su ejército, sin embargo, el mago egipcio logró escapar.

Muchos años después, Toth-Amon se alió con el único superviviente de los Hombres Serpiente, y juntos lanzaron un nuevo ataque contra Conan, que ahora el gobernante de la nación de Aquilonia. Conan, junto a su hijo Conn, derrotó a Toth-Amon y a su reptilesco aliado y destruyeron la corona.