Penitencia

Poco se sabe de la Monet St. Croix original, mas que era hermana de las que fueran miembros de la Fuerza Mutante de Élite, Emplaca y las gemelas Monet, al parecer, la joven falleció en un momento dado y en circunstancias desconocidas. Muestras de su ADN fueron recogidas por los antiguos servidores de Apocalipsis de modo que cuando Arma X se convirtió en el nuevo señor bajo el nombre de Arma Omega, se llevó a cabo un esfuerzo por parte de los principales científicos al servicio del nuevo mesías mutante para devolver a la vida a los mutantes alfa que habían muerto durante las guerras de Apocalipsis y Monet fue uno de los sujetos elegidos.

Sin embargo, el proceso de "resurrección" en masa de mutantes alfa fue interrumpido por parte de la resistencia humana liderada por el Profeta, que tras fingir su muerte logró quedarse solo en el laboratorio donde los cuerpos clonados todavía inertes, esperaban su turno para ser revividos mediante el uso de la Semilla Celestial. El Profeta colocó desconectó el sistema impidiendo nuevas resurrecciones y colocó explosivos para volar los cuerpos clonados, sin embargo, por alguna razón (tal vez conociera a la Monet original), devolvió el clon de Monet a la vida previendo que le sería útil en el futuro en su lucha contra el Alto Señor.

En efecto, el clon, sin la alteración mental que el Hombre de Azucar y la Bestia Oscura realizaban a los cuerpos antes de revivirlos, desarrolló sus propios pensamientos y estos distaban mucho de las ideas del Alto Señor y su mantra de destrucción de la raza humana. Monet se alineó con las clases bajas, aquellos mutantes que no pertenecían a la élite y que estaban obligados a vivir en la miseria y la pobreza, sin comida, sin hogar y sin recursos. Rebautizada como Penitencia, Monet se convirtió en portavoz de esta masa de mutantes que constituían la mayor parte de la población mutante, su primer acto fue construir la Iglesia de la Penitencia que le serviría de base y refugio para aquellos que lo necesitaran.

Pero sus actos públicos llamaron la atención de Arma Omega que envió a tres de sus lugartenientes, Cíclope II, Azazel y Coloso II para traer a Penitencia al redil y que se uniera a los mutantes alfa trasladándose a vivir con la élite. Sin embargo, Monet se negó ya que creía que para ayudar a la gente debía vivir entre ella, además consideraba que los objetivos del Alto Señor para las condiciones de la gente distaban mucho de los suyos y estaba dispuesta a oponerse a él. Los enviados de Arma Omega estaban dispuestos a llevarse a Monet a la fuerza pero esta usó sus poderes mentales para devolver a Coloso II los recuerdos de su original genético, permitiendo a Piotr recordar la muerte de su mujer a sus manos. Penitencia comprendió el dolor del mutante acorazado y le ofreció un puesto junto a ella para redimirse de sus pecados. También intentó hacer lo mismo con Summers pero este se negó y la atacó, Monet fue defendida por Coloso y pareció que iba a comenzar una lucha entre ambas facciones pero finalmente los envíados del Alto Señor se retiraron dejando a Coloso II junto a Penitencia.

La pelea había sido presenciada por el Profeta que vio con alegría como su intuición acerca de Monet se cumplía, es mas, la mutante alfa, si bien sus pensamientos estaban centrados en la comunidad mutante, no compartía la idea de masacrar a los humanos y aceptó urdir una alianza con los humanos para derrocar al Alto Señor, para lo que el Profeta aceptó entregarle al Hombre de Azúcar (que era su prisionero) para que se convirtiera en un nuevo jefe científico. Así, después de fingir sumisión ante el Alto Señor para que este le dejara libertad de acción, le fue entregado el Hombre de Azucar al cual logró poner de su parte gracias a cierta "persuasión" telepática.

Pero a pesar de la ayuda del Hombre de Azúcar, Penitencia y los suyos no estaban mas cerca de encontrar el modo de derrocar a Arma Omega, hasta que cierto día el Profeta le hizo llegar el cerebro clonado de Victor Von Muerte, en cuyo interior estaban los diarios de Reed Richards los cuales contenían la clave para privar al Alto Señor del poder imbuido por los Celestiales. Monet y el Hombre de Azúcar se pusieron a trabajar en ello, logrando crear una pastilla que, en caso de ser ingerida por el antiguo Arma X, le privaría del poder de los Celestiales convirtiéndolo en un mutante normal. Penitencia entregó la cápsula al Profeta, sabiendo que en caso que el humano fracasara nadie podría culparla a ella por el intento de derrocamiento. Sin embargo la resistencia humana probó ser tremendamente efectiva y gracias a la intervención de Jean Grey, la ex mujer de Arma Omega, lograron su objetivo quitando sus poderes al Alto Señor y almacenando los poderes de los Celestiales.

Tras la caída de Arma Omega, Penitencia se alzó ante los desfavorecidos y los marginados, clamando por un nuevo régimen, por una nueva vida mejor para ellos y para los humanos, sin embargo, las fuerzas leales al Alto Señor no estaban dispuestos a ceder el mando tan facilmente y se dispusieron a enfrentarse a Monet dando comienzo a una guerra civil, sin embargo, Penitencia tenía a su favor el número y finalmente los lugartenientes de Arma Omega hubieron de darse a la fuga.

Convertida ahora en la nueva líder de la comunidad mutante de Norteamérica, Penitencia cumplió sus "promesas electorales", dio a los mutantes de clase baja alimento, refugio y sanidad al tiempo que ponía fin a la caza de humanos, a los que permitió reagruparse en las Islas Hawai. Además, comenzó a prepararse para una eventual ataque por parte de Rojo Omega desde sus territorios en el este pero este ataque nunca se produjo ya que el poder de los Celestiales arrebatado a Arma Omega y guardado a buen recaudo actuaba como arma disuasoria.

Por desgracia, este nuevo periodo de paz no duró demasiado, ya que la Tierra 295 sufrió el ataque de las criaturas conocidas como los Exterminadores, creados hace milenios por los Celestiales y que habían llegado al planeta tras pasar milenios encerrados. Estos Exterminados sembraron el caos en la Tierra 295 y Penitencia se alzó ante ellos secundada por su fiel Coloso II y sus aliados, aunque se ignora el resultado del combate y si Monet sobrevivió a él.