Artemisa

La diosa griega conocida como Artemisa era la hija de Zeus, monarca de los Dioses Olímpicos, y de Letona, con quien Zeus tuvo también al hermano de Artemisa, Apolo Según la leyenda, Artemisa era una diosa contradictoria, aunque virgen protegía a las mujeres que iban a dar a luz, prefería la vida agreste en compañía de ninfas de la montaña, ciervos y otros animales a la vida en sociedad. Aunque era protectora de rebaños y vegetales, esta actitud benefactora entraba en completa contraposición a otras actitudes, como cuando mató al cazador Orión, o convirtió a Acteón en ciervo para que lo devoraran sus propios perros, o cuando junto a su hermano contribuyeron al exterminio de los Niobidas.

Artemisa permaneció en el Olimpo, con visitas frecuentes a la Tierra, donde fue adorado como diosa de la caza y protectora de las cosechas y rebaños, hasta que la llegada del cristianismo desplazó a los dioses griegos, que vieron como el número de sus adoradores disminuía. Como una de las hijas de Zeus, Artemisa tenía un puesto como miembro del Panteón que dirigía el Olimpo, por lo que se le ofreció formar parte del Panteón Olímpico como una de las deidades mayores.

El primer encuentro entre Artemisa y alguno de los héroes de este mundo (además de su medio hermano Hércules), se produjo durante la guerra entre el Olimpo y Asgard, que enfrentó a los dos retoños de amos panteones, ante la atenta mirada de ambos patriarcas. Cuando los Celestiales llegaron a la Tierra, para juzgar si esta era digna de vivir, los Panteones celestiales se reunieron, para intentar salvar a la Tierra, así, mientras las matriarcas de los Panteones reunían a varios de los bebes mas perfectos para mostrárselos a los Celestiales, los patriarcas creaban a la criatura conocida como el Destructor, que contenía la esencia vital de todos los Asgardianos, excepto de Thor. A pesar de que el Destructor fue finalmente derrotado, las matriarcas, que viajaron de un lugar a otro de la Tierra buscando a los niños, pudieron crear a los Jóvenes Dioses, que tras ser examinados por los Celestiales, sirvieron para que estos permitieran a la Tierra vivir.

Poco después, Artemisa fue testigo de como Zeus le daba a Thor el poder suficiente para resucitar a Odín, y este a su vez resucitaba a los demás Asgardianos. Artemisa, al igual que el resto de los Dioses Olímpicos, se vio envuelto en las conspiraciones de Ares, que convirtió en cristal a todos los Olímpicos, o los planes de Tifón, que envió al Limbo a Artemisa y el resto de sus compañeros.

Cuando los Señores del Mal invadieron la Mansión de los Vengadores, y dejaron a Hércules malherido en un hospital, Zeus ordenó a Hermes que viajara a la Tierra y trajera al Olimpo a su hijo, Hermes así lo hizo, y Hércules, en el Olimpo y en medio de delirios, acusó erróneamente a los Vengadores de ser los causantes de su desgracia. Enfurecido, Zeus mandó a sus hijos contra los Vengadores, Artemisa y sus hermanos viajaron a la Tierra dispuestos a obedecer las órdenes de su padre, así, Dionisios, disfrazado de vendedor de helados, le dio uno a una de los Vengadores, Hulka que la drogó, volviéndola contra sus compañeros, sin embargo el Dios del vino fue descubierto, y fue momentáneamente derribado por la Capitana Marvel, haciéndole perder el control mental sobre la vengadora. Entonces entraron en acción el resto de los hijos de Zeus para atacar a los Vengadores, Artemisa entre ellos, al tiempo que Hefestos y Ares luchaban con Thor en el Olimpo.

Artemisa permaneció en la sombra, presenciando el enfrentamiento entre sus hermanos y los Vengadores, pero cuando vio que la Vengadora conocida como la Capitana Marvel estaba derrotando a su hermanastro Hermes, decidió entrar en acción, y usó una de sus flechas mágicas para sorprender a la vengadora por la espalda, dejándola sin sentido. Poco después, siguiendo las órdenes de su padre, Artemisa viajó a la Tierra, a una isla del Caribe, a buscar a la única vengadora que quedaba libre, la Avispa, a quien Zeus consideraba una de las principales causantes del estado de su hijo. Artemisa sorprendió a la Avispa durante sus vacaciones, y usó sus flechas mágicas para derrotarla, capturarla y llevarla cautiva al Olimpo.

El resto de los Vengadores fueron confinados al Hades, de donde escaparon gracias a la ayuda de Namor, los Vengadores viajaron al Olimpo con la intención de convencer a Zeus de su inocencia, para ello contaron con el apoyo de algunos olímpicos que creyeron en su inocencia. Zeus, ordenó a sus hijos más leales que los volvieran a capturar, y Artemisa se encontraba entre ellos. Artemisa volvió a enfrentarse a la Capitana Marvel, pero la vengadora esta vez estaba prevenida contra las flechas de su adversaria, y la derribó con un poderoso rayo eléctrico.

Finalmente, gracias a la intervención de Prometeo, Hércules se recuperó del coma, y evitó que su padre matara a los Vengadores contándole la verdad. Arrepentido de sus actos, Zeus ordenó que ningún Olímpico volviera a pisar la Tierra, por lo que Artemisa ha permanecido en el Olimpo desde entonces.

Sin embargo ha tenido ocasión de volver a encontrarse con terrestres, como cuando los Vengadores volvieron a viajar al Olimpo para combatir a Tifón, que había secuestrado a Hércules y tomado el control del Olimpo, o cuando Hulk viajó al Olimpo junto con Hércules.

Con ocasión de la guerra entre los Dioses Oscuros y los asgardianos, los Dioses Oscuros tomaron la apariencia de los asgardianos y atacaron el Olimpo y a los Dioses Olímpicos para enemistar a ambos panteones. Durante días Artemisa y el resto de los Olímpicos combatieron contra los Dioses Oscuros, hasta que estos se retiraron finalmente.

De vuelta a la Tierra, Artemisa acudió a una reunión del Grupo Olímpico en donde la balanza de poder se había modificado, con Zeus muerto a manos de Mikaboshi y Ares muerto a manos del Vigía, ahora era Hera quien ostentaba el mando con mano de hierro, Artemisa se oponía a este curso de acción pero cuando vio como su madrastra trataba a Apolo (cuya oposición había sido mas firme) al que dejó malherido con un rayo, decidió mantener una postura mas neutral, este hecho provocó que Artemisa se apartara cuando Atenea planeó derrocar al Grupo Olimpo.

Tras la "muerte" de Hércules (mas bien desaparición) a mano de Atenea, Artemisa estuvo presente en la pelea entre los distintos aspirantes a convertirse en seres místicos, la batalla final enfrentó al protegido de Atenea y compañero de Hércules, Amadeus Cho contra el hijo de Hulk y campeón de Artemisa, Skaar, sin embargo los dos jóvenes terminaron uniéndose a los demás héroes que habían acudido a rendir sus respetos a Hércules desbaratando los planes de los Olímpicos. No se han vuelto a tener noticias de Artemisa desde entonces.