Frost

Everett Donnelly fue un superviviente de la explosión gamma que el villano Líder ejecutó en la localidad americana de Middletown. Tas la explosión de la bomba, la radiación estaba matando a Everett pero el Líder decidió, ávido como siempre de experimentación, decapitarle e instalar su cabeza en un cuerpo androide. El Líder repitió esta experiencia con varios moribundos más aunque se desconoce el número exacto. Seis de ellos fueron capaces de escapar de Feudo Libre y decidieron unirse formando un grupo llamado La Cabecera dedicado a buscar venganza contra el malévolo Líder por haberles convertido en monstruos.

Sin embargo, en un momento dado, Frost abandonó a sus compañeros y decidió ir por libre, comenzando a trabajar para Max Striker, un mafioso para el que llevó a cabo varios asesinatos. Llegó un momento en que Striker puso sus ojos en las Vegas, ya que pretendía hacer negocios en la ciudad, sabiendo que para poder introducirse en la ciudad de los casinos debía hacer frente a la oposición de Michael Berengetti, el mas importante de los propietarios de casinos, Striker ordenó a Frost que lo matara y el androide lo asesinó.

Pero este acto trajo consecuencias que ni Frost ni Striker habían tenido en cuenta y es que un antiguo empleado de Berengetti regresó a las Vegas tras saber que su amigo había muerto, este antiguo empleado no era otro que Hulk que acudió a la ciudad de los Casinos acompañado de sus aliados del Panteón. La llegada de Hulk sorprendió a Striker y sus secuaces en el Casino del fallecido Berengetti, cuando intentaban extorsionar a su viuda para que le entregara los papeles del fallecido, la Masa despachó a los esbirros del mafioso, el cual envió a Frost contra el coloso esmeralda el cual, sorprendido, vio que era incapaz de liberarse de la presa del androide, finalmente Striker abandonó el lugar con sus secuaces.

Hulk y los miembros del Panteón, a los que se les unió el Castigador que estaba siguiendo el rastro de sangre dejado por Frost tras de si por todo el país, urdieron un plan para encerrar a los asesinos de Berengetti, así, uno de los miembros del Panteón, Paris, se reunió con Striker fingiendo traicionar a su jefe, informándole que Mr Fixit esperaba un cargamento de droga que iba a llegar en los próximos días y le da la posibilidad de denunciarlo a la policia para que se le lo lleven. Striker aceptó el trato pero le previene contra posibles traiciones y para demostrarlo, envió a Frost contra él y a punto estuvo de estrangularlo.

Llegado el momento, Frost, Striker y sus esbirros llegaron al almacén indicado por Paris y presenciaron lo que parecía ser una transacción de drogas entre Mr Fixit y un tal Frank Tower (en realidad el Castigador disfrazado), tomando fotos del evento. Tras esto, Striker irrumpió en la reunión y amenazó a Hulk con mostrárselo a la policía si no le entrega las drogas y abandona las Vegas.

Mr Fixit acepta el trato, y tirándole de la lengua consigue que el mafioso confiese que fue Frost por orden suya quien mató a Berengetti, tras obtener la confesión, Hulk le lanza el paquete blanco a Striker que resultó ser leche en polvo con lo que las fotos tomadas por Frost no tenían validez. Entonces se presentó la policía dispuestos a detener al mafioso por el asesinato de Berengetti, Frost sacó una ametralladora de gran calibre y abre fuego indiscriminadamente, tan indiscriminadamente que alcanza a su patrón en la rodilla tras lo cual escapó abandonando al mafioso.

Hulk persiguió a Frost y ambos combatieron por toda la Avenida, en un momento dado, ambos colosos se agarraron y Frost comenzó a generar frío hasta cubrir a su rival de hielo pensando que ya lo había derrotado, pero Hulk escapó de su gélida prisión y continuó la lucha, clavando a su enemigo contra la pared al atravesarlo con un palo, a continuación le agarró por la cabeza y para su sorpresa, se la arrancó, sonriendo, Frost se burló de él y la cabeza explosionó. Se ignora si Frost murió en la explosión o por el contrario se transfirió a otro cuerpo sobreviviendo.