San Pablo

San Pablo es una pequeña isla caribeña gobernada por el dictador conocido únicamente como el General. El dictador usaba el poder de su ejército para imponer su voluntad sobre el pueblo, que nada podía hacer para oponerse a su sanguinario líder, a excepción de un pequeño grupo de rebeldes, la guerrilla, que operaba en las colinas pero que poco podía hacer ante el equipado ejército del General.

Con el poder local bajo su control, como otros muchos dictadores, el General temía una posible invasión extranjera que le arrebatara el gobierno y plagó las costas de San Pablo de defensas para impedir un ataque de potencias extranjeras. Dicho ataque no se produjo pero la paranoia del General provocó que cuando el coloso esmeralda conocido como Hulk llegó a San Pablo, en busca de un lugar desolado al cual llamar hogar, el dictador pensó que era la antesala de un ataque extranjero y ordenó a sus tropas que acabaran con él, sin embargo la Masa acabó con los soldados enviados contra él con facilidad y a continuación encontró refugio en unas ruinas cercanas.

Poco después a San Pablo llegaron dos antiguos aliados de Hulk, se trataba de Estela Plateada y Namor que venían a reclutar a su ex aliado para invadir una base cercana donde la ONU estaba construyendo un artefacto experimental que podía acabar con toda la vida en la Tierra, cuando el General vio a los recién llegados quedó convencido que San Pablo era objeto de un ataque y envió a todas sus fuerzas para combatir a los tres superhombres con la esperanza de una victoria rápida que impidiera a la resistencia aprovechar la marcha del ejército para alzarse contra su poder, los héroes por su parte dejaron de lado sus diferencias y se unieron para derrotar al ejército del dictador.

Por su parte la guerrilla, cuando vieron que la mayor parte del ejército había abandonado la capital, se alzó en armas recuperando el control de la ciudad mas importante y a continuación aprovecharon la derrota de las tropas del General a manos del ejército para lanzar un ataque desde las colinas que provocó que las desmoralizadas y derrotadas tropas del dictador se rindieran o retiraran por todas partes. Triunfantes, los rebeldes recuperaron el control de San Pablo mientras que el General enloquecía al ser consciente de su derrota siendo internado por los nuevos gobernantes del país al tiempo que los héroes abandonaban la isla para hacer frente al peligro para el que se habían reunido.