Seth

Seth es el nombre del Dios egipcio de la muerte, adorado por los habitantes del antiguo Egipto durante siglos, hasta que poco a poco la mitología egipcia fue erradicada por otras mitologías como la griega, la romana, y finalmente por el cristianismo. Además, el malvado Seth se hizo pasar por el Dios Serpiente Set, para aprovecharse de los adoradores del Dios Antiguo.

Seth es el hijo de Geb, antiguo monarca de los dioses del panteón egipcio y dios de la Tierra, y su esposa Nut, diosa del cielo. Seth tenía dos hermanos, Osiris, dios del Sol, e Isis, diosa de la fertilidad. El Dios del Mal se casó con Nepthys, la cual no le dio ninguna descendencia, aunque si se lo dio a Osiris, en la figura de Anubis. Seth vio con impotencia como su padre Geb le otorgaba a su hermano Osiris el gobierno de Heliopolis, celoso, Seth hizo todo lo posible por conseguir ese puesto al precio que fuera. Los celos de Seth le hicieron albergar un profundo odio hacia su hermano Osiris, por ello lo traicionó, lo asesinó y desmembró su cuerpo para convertirse en monarca de los Dioses Egipcios.

Sin embargo Isis, que además de sus propios poderes era una poderosa hechicera, consiguió, con la ayuda del propio Horus y de Anubis, hermanastro de Horus, devolver a la vida a Osiris. Osiris encargó a su hijo Horus que persiguiera a Seth y le hiciera pagar por la traición que había cometido. Después de una larga búsqueda Horus encontró a Seth, y se produjo una enconada lucha que duró siglos. Pero tras matar a Osiris, Seth había obtenido un increíble poder que le hacia más poderoso que ningún dios del panteón egipcio, así que finalmente Seth logró derrotar a Horus, y usó su poder para aprisionar a su sobrino, a Isis y a Osiris en una pirámide en la Tierra, de la que no podrían escapar hasta que apareciera Atum, el padre de todos los dioses, para liberarlos.

Horus y su familia no se liberaron de su encierro hasta el siglo XX, cuando Odín, monarca de los dioses asgardianos, y que en esa época vagaba por la Tierra desmemoriado y sin conciencia de sus poderes, fue encontrado por la familia encerrada, y le hicieron asumir la apariencia de Atum para liberarlos. Esto les llevó a un enfrentamiento con Seth, que veía como sus enemigos podrían escapar de su encierro, y Thor, hijo de Odín, que no veía con buenos ojos el que unos desconocidos utilizaran a su padre para sus planes. Finalmente Thor tuvo conciencia de la maldad de Seth, y tras esto, ayudado por Odín-Atum, combatió a Seth, junto a Horus y su familia, y no solo le derrotó, sino que además le arrancó la mano derecha en el combate, tras esto Seth fue expulsado del Reino.

Tras derrotar a Seth, Horus y su familia regresaron a Heliopolis, solo para descubrir que en sus largos años de cautiverio, Toth, antiguo visir de Osiris y monarca provisional de Helipolis, había trasladado la morada de los dioses egipcios a un plano místico. Allí, Osiris retomó el mando de Heliopolis, con Horus a su lado, sin embargo, no tardó en producirse un nuevo ataque por parte del malvado Seth, que por medios místicos logró capturar a sus compañeros y arrebatarles sus poderes. Uniéndolos a los suyos obtuvo un formidable poder que planeaba usar para cumplir sus objetivos, sembrar la muerte por todo el Universo. Seth llevó a Horus y su familia hasta su propia dimensión de la muerte, pero allí Horus y sus compañeros lograron escapar, pero dado que estaban sin poderes, permanecieron atrapados en la dimensión de Seth, donde serían conocidos como "los Perdidos".

El primer objetivo de Seth fue atacar Asgard, deseando vengarse de Odín y Thor, artífices de su derrota más humillante y la pérdida de su mano. Seth viajó hasta el reino de Surtur, donde combatían el demonio llameante y Odín. Allí secuestró al Monarca asgardiano, al que llevó hasta su dimensión mística. Posteriormente Seth envió a sus poderosas legiones contra Asgard en una lucha que duraría largo tiempo.

Al principio Seth lanzó ataques aislados contra Asgard, valiéndose de portales dimensionales para por el que envió amenazas contra Asgard, para después retirarse. Algunos de estos ataques fue el intento de asesinato de Balder, o el ataque de varios monstruos contra la población asgardiana. Finalmente, las tropas del dios egipcio invadieron Asgard, en un número tan grande que los asgardianos no pudieron rechazarlos pese a combatir valerosamente. Mientras la guerra continuaba en Asgard, Seth planeaba también matar a su gran enemigo, Thor, causante de la pérdida de su mano y que permanecía en la Tierra ajeno a la guerra que se desarrollaba. Seth envió a la Tierra a uno de sus agentes, "el Aplastadioses" junto con algunas tropas, para que mataran al Dios del Trueno en la Hidrobase de los Vengadores. Thor, ayudado por sus compañeros el Capitán América y el Caballero Negro, logró rechazar el ataque.

En una segunda ocasión, Seth concedió poderes a unos humanos para que atacaran a Thor en la Tierra, estos humanos formaron la Fuerza de Tierra, que finalmente se aliarían con Thor y viajarían hasta la dimensión de Seth para combatir al egipcio. Sin embargo, Thor y sus camaradas fueron derrotados, y solo la humana llamada Guerrera del Viento, logró escapar, encontrándose con Horus y sus camaradas, a los que se unió para intentar rescatar a Thor y sus compañeros. Mientras tanto en Asgard, Seth y sus legiones combatían a los asgardianos, quienes, superados en número, se refugiaron tras los muros de la ciudad interior. Entonces Seth retó al monarca de Asgard, Balder, a decidir la batalla en un combate entre ambos. Balder el Bravo aceptó el reto, y se enfrentó a Seth en combate personal, sin embargo el egipcio planeaba derrotar a Balder mediante engaños. Finalmente usó su poder para herir a Balder y lo hubiera matado de no intervenir la hechicera Karnilla. Con Balder derrotado, las tropas de Seth tomaron Asgard gracias a un traicionero ataque, obligando a los asgardianos a retirarse. Parecía que la victoria de Seth iba a ser completa. Sin embargo, Horus y los demás egipcios se unieron a Thor y sus compañeros, que habían escapado de su encierro. Tras rescatar al prisionero Odín viajaron a una Asgard devastada por las legiones de Seth, y a punto de ser destruida. Odín envió a Thor a combatir a Surtur, mientras que él se disponía a enfrentarse al dios de la Muerte. Así, Odín logró reunir a las diezmadas fuerzas asgardianas y sus aliados celtas, y los lanzó en un feroz contraataque contra las legiones de Seth. Viendo que el curso de la batalla se volvía contra él, Seth intentó huir, sin embargo, la Fuerza de Tierra distrajo al dios el tiempo suficiente para que Horus y sus compañeros pudieran atacarle. Pese a todo, Seth logró derrotarlos, pero fue finalmente vencido por Odín. Los poderes que Seth había robado volvieron a sus legítimos propietarios, por lo que los demás egipcios recuperaron sus poderes, y Seth pareció morir.

Pero no murió y, un tiempo después, lanzó un nuevo ataque contra los Nueve Mundos. Seth se encarnó en el cuerpo de un mortal y trató de construir un ejército para conquistar primero la Tierra y luego Asgard. Este ejército se llamaba los Dientes del Dragón y entre ellos se encontraban algunos superhumanos como Arenas Movedizas, Mangosta o Bisonte. Los ejércitos de Seth tuvieron enfrentamientos con los humanos que llevaban armas asgardianas, como eran Thunderstrike o Hacha Sangrienta. Mientras esto pasaba, Seth ayudó a Loki a recuperar su cuerpo físico, que había sido destruido recientemente, a cambio de que se ocupara de sus dos enemigos. Sin embargo Loki fracasó, al igual que Seth, y finalmente Thunderstrike, armado con su maza y el Hacha Sangrienta se enfrentó a Seth y destruyó su cuerpo mortal.

Seth no solo sobrevivió, sino que regresó para lanzar un nuevo ataque contra los Nueve Mundos. Odín, con el fin de prevenir el Ragnarok, la muerte de los Dioses, que provocaría el Fresno Mundial, intentó engañar al Fresno, haciéndole creer que todos los Dioses habían muerto, y que el Ragnarok ya se había producido. Para eso, Odín lanzó un hechizo que convirtió a todos los asgardianos, menos a Thor, en mortales, privados de poderes y de memoria, la última fase del hechizo consistía en que él mismo perdería memoria y poderes, y se vería exiliado a la Tierra. Seth supo de los planes de Odín, y primero manipuló a un mortal para que descubriera el Fresno Mundial, y le dotó de tecnología para provocar un Ragnarok. Sin embargo este mortal fue detenido por Thor.

El plan de Odín preveía que Thor defendería Asgard y la Tierra en ausencia de los asgardianos, pero el Dios del Trueno había desaparecido como consecuencia de la batalla contra Onslaught, y los otros sustitutos para Thor estaban incapacitados: Thunderstrike muerto, Bill Rayos Beta enfermo, y solamente Red Norvell continuaba vivo. Red Norvell, ahora un elemento clave de los planes de Odín, y siguiendo sus directrices, avisó a los asgardianos convertidos en mortales, de la amenaza del Dios Serpiente. Sin embargo, Seth envió a sus sirvientes contra Norvell, y lo localizaron y asesinaron, pero no antes de que pudiera avisar a algunos de los asgardianos, que se unieron para combatir a Seth, aún en sus formas mortales, aunque no pudieron evitar que Seth secuestrara a Odín en su forma mortal.

Aliados con Ulik y la Encantadora, los "Dioses Perdidos" viajaron a la dimensión de Seth para liberar a Odín, sin embargo, los asgardianos fueron capturados. La intervención de Loki, permitió escapar a los asgardianos, que liberaron a Odín, y lanzaron el hechizo que devolvía a los asgardianos a su estado divino. Seth se enfrentó a Odín, hasta que finalmente este logró derrotarle, y matarle aparentemente, aunque el Dios Serpiente ya ha demostrado ser capaz de sobrevivir a otras "muertes" aparentes.