Marvel Comics Presents vol 1

El oficial semiretirado del FBI, Jake Bage, ha llamado al Capitán América, pero cuando entra lo encuentra muerto en el suelo y es atacado por un villano con armadura que se hace llamar el Dios de la Guerra. El Capitán América no es capaz de resistir las embestidas de la maza del villano y termina saliendo despedido por la ventana. Afortunadamente logra agarrarse a una cornisa, pero eso da tiempo al Dios de la Guerra a destruir con ácido los archivos de Bage y escapar. Cuando Steve logra regresar al departamento de su amigo encuentra que en su escultura favorita hay una grabación que le dice que el Dios de la Guerra está reclutando a un ejército clandestino y la única pista que tienen es que es una figura política o militar. El Agente Patriota X-4 está investigando otra pista.

El Capitán América va a ver a Brad Rever, el propietario de Able Electronics para ver si puede pasarle alguna información, pero éste no es consciente de ningún problema de seguridad con su personal. Mientras el Capitán América está hablando con Brad aparece Dan, el hijo de Brad, quien está sorprendido por la cancelación del pedido con Afran Inc. Brad le dice a su hijo que existen dudas sobre los clientes de esa industria y teme que sus productos puedan ir a manos del enemigo. Dan le asegura que ellos no hacen ningún componente secreto que no puedan vender y que eso los coloca en posición de inferioridad con sus competidores, pero aún así Brad insiste en que deben esforzarse en buscar otro tipo de clientes.

El General Hager realiza unas declaraciones ante la prensa contra las políticas de seguridad débiles y hace una defensa encarecida sobre la necesidad de ser fuertes. Lo ha acompañado su hija Mora y el Major Duner, leal al General. pasando desapercibido un hombre los observa hablar. El Senador Weason es preguntado sobre las declaraciones del General Hager que atacan a su política militar, pero él defiende su postura alegando que se debe tener una postura moderada y que aboga por una política militar de defensa y no de agresión. Su asesor Mel le felicita por sus declaraciones, pero éste le dice que la moral del General no mermará por ellas.

Después de que el FBI rechace ayudar al Capitán América por no tener suficientes evidencias, Steve decide ir a ver a X-4. Llega justo a tiempo a su departamento, ya que está siendo atacado por los hombres del Dios de la Guerra. Steve ayuda al agente a escapar quien huye por un conducto secreto. El Capitán se queda luchando contra los agresores, pero la llegada del Dios de la Guerra lo obliga a escapar también. Más tarde cuando se reúne con X-4, el agente le revela la existencia de un club de lucha que puede tener relación con el Dios de la Guerra.

Gracias a unos sensores especiales instalados en el escudo por los técnicos de Able, pueden analizar la energía emitida por la maza del Dios de la Guerra y diseñar un dispositivo capaz de neutralizar sus impactos. Al marcharse, Dan le pregunta a su padre que quería el Capitán América, pero le responde únicamente que ayuda técnica.

El Capitán América se pasa por el gimnasio facilitado por X-4, pero en el exterior no ve nada sospechoso. Tras ello se pasa por el despacho del General Hager, pero el militar está completamente en contra de los justicieros enmascarados y lo invita a marcharse. Mora, la hija del General, llama al Capitán América para decirle que puede ayudarlo y mientras habla se enciende un cigarillo, o eso piensa Steve, ya que en realidad sale un chorro de gas que alcanza de lleno la cara del Capitán América y lo deja inconsciente. Mora llama por teléfono y pide que vengan a recoger al Capitán América.