X-Men vol 1

Pícara recibe una llamada de emergencia del director de una prisión convencional donde han tenido que acoger a varios reclusos superhumanos tras la destrucción de la Balsa y se está produciendo una fuga. Los 4 Fantásticos están en el espacio y los Vengadores dispersados por todo el mundo ayudando en los daños causados por la Fuerza Fénix, así que han sido ellos quienes le han sugerido que contactase con la Patrulla-X. Pícara llama al Mímico, el único que queda en edificio ya que profesores y alumnos se han ido a Tábula Rasa, y suben a bordo del Pájaro Negro.

Durante el viaje hacia la prisión, el Mímico pide consejo a Pícara sobre que curso de acción debe tomar, si quedarse o irse de la Patrulla-X. Pero antes de que pueda darle una respuesta llegan hasta la cárcel. Entre los presos amotinados se encuentran Arenas Movedizas, Rubí Jueves, Silf Fever, Sobrecarga y el Esquizoide. Pícara ha tomado prestados varios poderes del Mímico antes del combate, lo primero que hace es intentar absorber los poderes de Rubí Jueves, pero como la mujer tiene una cabeza cibernética no hay nada que coger y advierte a sus compañeros. Pícara pide al Mímico que aguante y ella va en busca de los presos que todavía no se han escapado. La mujer pide colaboración para detener la lucha y promete que hablará en su favor con el alcaide. Equinoccio, Armadillo y el Hombre Toro deciden ayudar y le ofrecen sus poderes. Gracias a ellos Pícara puede socorrer al Mímico y entre los dos sofocan el motín.

El Pájaro Negro aterriza de regreso al Instituto Grey. Mientras descienden, Pícara le dice al Mímico que en realidad no la necesita a ella para tener una respuesta a su pregunta y que él ya sabe en su interior que es lo que tiene que hacer. Mientras hablan, otro Pájaro Negro desciende y bajan de su interior los profesores y alumnos de la escuela. El Mímico le agradece sus comentarios y se pone a volar, pero antes de que se vaya más lejos Pícara le dice que lo que siente, el mejorar día a día continuar aprendiendo es lo que se llama vida.