Daredevil vol 4

Daredevil a penas puede moverse afectado por la profunda depresión infundida por los hijos del Hombre Púrpura. De hecho prácticamente no siente los golpes que le está dando Killgrave con un listón de madera intentando obligarle a que le diga donde encontrarlos. Cuando Killgrave le pide que le muestre algún miedo, entonces se repone lo suficiente para pegarle un fuerte golpe por instinto. El Hombre Púrpura decide huir y Matt regresa hasta la oficina. Matt quiere ir a por los chicos antes de que los encuentre el Hombre Púrpura, pero no sabe por donde empezar a buscarlos. Afortunadamente para Kirsten es fácil imaginar donde iría una banda de chicos que pueden hacer lo que deseen, a una tienda de atracciones para niños. Sin embargo, el Hombre Púrpura también los ha localizado y ha atrapado ya a Jamie y Joey. Justo cuando ata al niño, Daredevil se lanza contra él. El Hombre Púrpura le ordena que se muera y Matt tiene una fuerte taquicardia. En condiciones normales, Matt puede resistirse con facilidad a sus poderes de control, pero esta vez está debilitado por el ataque previo de sus hijos. Cuando logra reponerse y localiza a uno de los niños que se había ocultado debajo de una mesa. Matt logra calmarlo y lo usa para localizar la sala de control de sonido. Así incrementa el volumen de la música tan alto que el Hombre Púrpura es incapaz de dar órdenes a nadie. Antes de que su enemigo se de cuenta de lo que ha pasado, Matt se lanza contra él y lo deja inconsciente de un puñetazo. Los niños son entregados a las autoridades y dados a hogares de acogida o familiares separados entre sí, de forma que sus pieles recuperan su tono normal. Matt asegura a Kirsten que se encuentra bien, pero esa noche cuando se queda solo en su apartamento se acurruca en la cama en posición fetal sin terminar de desvestirse.