Star-Lord and Kitty Pryde

Starlord trabaja como cantante en el Salón del Silencio para esconderse a plena vista. Pese al éxito que tiene y a que todas las mujeres se vuelven locas por él, su cabeza solo piensa en Kitty. Precisamente una contrapartida suya que trabaja para la Fundación de Valeria von Muerte, se ha citado en el local con Gambito para comprarle una anomalía, uno de los objetos que pueden poner en duda la teoría creacionista del Mundo de Batalla. Quill sube al escenario y al ver a Kitty discutiendo con Gambito, malinterpreta la escena y se mete por en medio. Su aparición ponen en alerta a Gambito que se cree que es una encerrona. El traficante decide romper el trato y se marcha ruidosamente del bar pese al intento de Drax de impedir su fuga. Kitty sale tras él, pero Quill la agarra por el brazo y pese a no ser su misma Kitty la besa. La mujer le da un puñetazo. Sorprendentemente salpica sangre sobre su detector de anomalías y se queda asombrada al descubrir que esa persona es una anomalía viviente, así que lo esposa y se dispone a llevarlo consigo a Muertegard.