Civil War vol 2

Un dron de Stark sigue el rastro del tirador que ha matado a Sharpe dentro del Azul, el territorio de la facción del General Rogers. Sin embargo, Ororo Munroe detecta su presencia y lo tumba de un rayo. La mujer guarda un gran rencor hacia Stark al que considera responsable directo de su esposo T'Challa. Ororo lleva el dron hasta Villacero, donde Coloso le arranca el cerebro cibernético, siente mucha curiosidad por saber que cosa estaba tan interesado en ver para arriesgarse a las represalias. Piotr se lo entrega a Ororo para que lo lleve al Geneneral Rogers. Él se va ha ocupar de devolver el dron con la ayuda de Magneto.

Barnes informa a Stark que se está acercando un proyectil que procede de algún punto cerca de Villacero. Al preguntarle si ha pedir a la Coronel Danvers que despliegue un escuadrón, Stark le dice que no hace falta. Una bola de metal hecha a partir de los restos del dron se dirige a toda velocidad hacia ellos. En la bola hay escrita la frase "la próxima vez será un Hulk" y se estrella inofensivamente contra el campo de fuerza del edificio. Aunque está seguro que no tienen ningún Hulk a su disposición, Stark ha tenido una idea y llama a Jennifer. Cuando se reúne con él en el centro de mando le confiesa que ha estado analizando los acontecimientos desde lo ocurrido en Stamford y ha detectado eventos imposibles que no deberían haber ocurrido. Por ello cree que los han engañado. Por este motivo quiere que Hulka se infiltre en el Azul y vaya a Villacero a investigar.

Peter estás furioso por la intromisión del dron en El Azul y presiona a Rogers para responder a la provocación. Rogers intenta calmarlo, pero Peter lo convence para ir a ver el Proyecto Gaussiano. William Baker, también conocido como Flint Marko, está encerrado en un contenedor especial y decide someterse voluntariamente al Proyecto Gaussiano a cambio de que le cambien su castigo por el de prisión convencional. El aparato funciona a la perfección y anula los poderes de Marko transformándolo en un ser humano una vez más. Aunque el aparato funciona bien, el Azul carece de los recursos necesarios para hacerlo funcionar de nuevo. Sin embargo, en el Hierro está la única fuente directa. Rápidamente Peter se ofrece para ir. Rogers accede, pero le recuerda que hay otros millones de personas que necesitan su ayuda tanto como MJ.

Peter conduce a su grupo en una aeronave hasta el Azul. Lo acompañan un grupo de superhombres y cada uno de ellos obtendrá una recompensa. Elektra será resarcida por la muerte de Murdock, Azara restituirá el honor al linaje de Pantera Negra, Veneno quien tendrá un cierre a lo que le ocurrió y él recuperará a su familia. En la primera parada se acercan a unas instalaciones fuertemente custodiadas por Centinelas Stark.

La gente de Emma Frost ha preparado unos documentos para que Hulka pueda infiltrarse en el Azul y llegar a Villacero. En principio la documentación es indistinguible de una auténtica y no debería tener problemas, pero al presentarse ante las puertas por la noche, se hace un examen más profundo de los visitantes, así que llaman al Profesor-X para que certifique que la mujer es quien dice ser.