Avengers vol 1

Tras la destrucción del Mundotrono Skrull, el caos y la rebelión se extienden por la Galaxia Andrómeda. Todos los gobernadores planetarios se declararon emperadores y comenzó una guerra civil entre todos ellos. En medio del caos, una mercenaria llamada Nébula reunió un pequeño ejército con refugiados de varios mundos, y comenzó a conquistar planeta tras planeta. Sin embargo, Nébula encontró una gran resistencia en el general Zedrao, que fortificó la base de su flota en un planetoide, y fue capaz de rechazar los ataques de Nébula. La pirata se retiró, prometiendo regresar para destruir la base de Zedrao.

La Capitana Marvel destruye el torpedo antimateria que Nébula ha lanzado sobre la base skrull, haciéndolo explotar en el espacio. Luego, la Capitana se reúne con el líder skrull, el general Zedrao, y deciden hacer creer a Nébula que ha conseguido destruir la base. Los skrulls parten en sus naves y destruyen la superficie del planetoide, escapando del lugar.

Hércules acompaña al Señor del Fuego en una tarea para compensar el daño que causó a la ciudad de Nueva York. El Señor del Fuego destruye una montaña de residuos tóxicos.

El Capitán América llega a la Mansión de los Vengadores, y saluda a Hulka y a Wyatt Wingfoot, que salen para disfrutar de una velada. Jarvis le dice al Capi que está preocupado por no tener noticias de la Capitana Marvel. Luego, el Capi ve que el Caballero Negro ha encontrado el Corcel Atómico que la Bestia se trajo de Wundagore, y está aprendiendo a utilizarlo. De pronto, Starfox avisa a los Vengadores que la consola de comunicaciones ha recibido una transmisión de la Capitana Marvel desde el espacio, en la que pide ayuda. Starfox consigue rastrear la llamada, y los Vengadores parten hacia el espacio en un quinjet, acompañados por el Señor del Fuego.

El quinjet de los Vengadores alcanza la nave de Starfox en la órbita de la Tierra, y atracan en su hangar. Starfox acude a la cabina para preparar el viaje hasta el lugar de origen de la transmisión de la Capitana Marvel.

Nébula y sus hombres contemplan la destrucción de la base skrull. Levan informa a Nébula que no hay ningún rastro de vida, por lo que se deduce que la Capitana Marvel y los skrulls han perecido en la explosión. Entonces Nébula ordena destruir el planetoide y le dice a Gunthar que ponga rumbo a su siguiente objetivo.

El Gobernador Gorth asume una forma imponente para recibir a Nébula y a su lugarteniente Levan. Sin embargo, ella no se deja engañar por su aspecto y le obliga a volver a su forma original. Entonces, Nábula le muestra a Gorth el arma que le convertirá en el próximo emperador de todos los skrulls: Santuario II.

La nave que lleva a los Vengadores y al Señor del Fuego llega a la Galaxia Andrómeda, y es interceptada por una flota skrull. Al identificarse, la Capitana Marvel, que acompañaba a los skrulls, entra en la nave y abraza a sus compañeros. Luego los acompaña hasta la presencia del General Zedrao, líder de la flota skrull. Zedrao y la Capitana Marvel les hablan a los Vengadores de la amenaza que supone Nébula, ahora que se ha hecho con la base de Thanos, Santuario II. El Señor del Fuego se resiste a ayudar a los skrulls, y el Caballero Negro no cree que deban inmiscuirse en un problema ajeno a la Tierra, pero la Capitana les convence de que Nébula podría llegar a amenazar la Tierra si no se la detiene, y la Avispa acepta ayudar a los skrulls.