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Greer Grant conoció a Bill Nelson un día en el que iba tarde a la facultad en su segundo año de carrera. Para Bill era su primer día de trabajo como policía. Los dos se gustaron y volvieron a verse, iniciando así una relación que culminó con el matrimonio de ambos y el abandono de Greer de su carrera universitaria. Bill era muy protector hacia su esposa y, aunque eran felices, no le dejaba hacer tareas que él consideraba masculinas.

Una noche de verano Greer y su esposo salían del cine cuando vieron a un atracador escapando tras asaltar una farmacia. Bill sacó su arma y ordenó al maleante detenerse, pero no se percató que tenía un cómplice que disparó traicioneramente contra él matándolo. En el entierro su padre le dijo que tenía que ser fuerte, pero Greer siempre había estado sobreprotegida con alguien que se preocupase por ella. Cuando la pérdida de Bill empezó a hacerse más soportable, Greer intentó encontrar trabajo, pero no rechazada hasta que un día por casualidad se topó con su vieja profesora de física y la Doctora Tumolo le ofreció convertirse en su asistente de laboratorio. Tumolo estaba trabajando en un proyecto subvencionado por Malcolm Donalbain, un aparato capaz de hacer que una mujer obtuviera su máximo potencial físico y mental. Cuando llegó el momento de realizar la primera prueba sobre una mujer, Tumolo quería usar a Greer como sujeto experimental, pero Donalbain impuso a su propio sujeto a una joven llamada Shirlee Bryant. La científico estaba en desacuerdo, pero Donalbain amenazó con cortarle los fondos. Finalmente Greer convenció a Tumolo para que siguiera adelante con lo que ella se proponía, usar a Shirlee, pero también a ella a espaldas de Donalbain. Así lo hicieron y Greer mostró tener mejores capacidades que Shirlee. Llegados a cierto punto Tumolo decidió romper con Donalbain. Fue a su casa para decírselo, pero descubrió que Shirlee había estado copiando su máquina para Donalbain, quien pretendía crear a un ejército de amazonas disfrazadas con trajes especiales de gata que eran controladas por medio de unos collares anuladores de la voluntad. Cuando Donalbain probó el collar en Shirlee forzó sus capacidades al máximo y la chica se mató al caer del muro que Donalbain le ordenó escalar. Donalbain robó uno de los disfraces y escapó de ahí. Su intrusión no pasó desapercibida y esa misma noche varios esbirros de Donalbain se presentaron en casa de Tumolo causando una explosión. Greer vio a su profesora entre los escombros y decidió tomarse la justicia por su cuenta equipándose con el traje que la anciana había robado.

En mitad de la noche tormentosa, la Gata escala un alto edificio. Un rayo cae cerca suyo y pierde el equilibrio, pero gracias a sus garras retráctiles logra mantenerse sujeta a la pared y puede proseguir el ascenso. Finalmente atraviesa una ventana, pero es sorprendida por un mantón. La Gata se zafa de la presa y tumba al hombre. Enseguida ha de enfrentarse a dos hombres más, pero cuando está luchando contra ellos la habitación se llena de gas y la Gata cae dormida. Cuando recupera el conocimiento se encuentra atada y en manos de Mal Donalbain, el hombre al que intentaba detener. Donalbain le muestra la máquina con la que pretende crear un ejército de amazonas para sus centros de salud y convertirse así en el líder de espiritual y físico de una nación de especímenes perfectos. La Gata se libra del hombre que la sujeta y lo arroja contra Donalbain. El hombre histérico por que le hayan tocado ordena a Zabo que mate a su propio esbirro y luego a la Gata. Zabo cumple lo primero, pero la Gata es lo suficiente ágil para librarse de las ataduras y conseguir huir. Esa misma noche regresa y Donalbain y Zabo la descubren manipulando la máquina. La mujer logra desequilibrar al gigante descerebrado y lo arroja contra la máquina destruyéndola. La Gata persigue entonces a Donalbain quien al disparar contra ella deja la habitación a oscuras. La amenaza de ser tocado de nuevo enloquece a Donalbain y el hombre se suicida de un disparo.