X-Man

Cíclope libera a un prisionero de los Corrales, Nate Grey. Sin embargo, éste se encuentra confuso y no acepta ir con Cíclope, sino que escapa atravesando las paredes con su poder telequinético.

Bishop discute con Magneto, diciéndole que debería haberles contado todo a los demás. Sin embargo, Magneto le responde que ha actuado de la mejor manera posible. Entonces, a magneto le parece ver unas figuras en un espejo, pero un segundo después han desaparecido, y piensa que serán imaginaciones suyas.

Nate trata de acceder a sus recuerdos bloqueados, pero solo consigue lanzar una onda telequinética que arrasa todo a su alrededor. Forja y sus compañeros le están esperando cuando termina su búsqueda psíquica, y Forja le dice que no vuelva a hacer algo así sin supervisión. Más tarde, el grupo de teatro de Forja realiza una actuación en un poblado de refugiados. Nate utiliza su telepatía para que las autoridades locales no les reconozcan como mutantes, y Forja le advierte que utilizar su poder podría atraer la atención de Apocalipsis hacia él. Tiempo después, el grupo de Forja llega a otro poblado y ve un destacamento de Infinitos que realizan una cosecha de humanos. Forja y los demás atacan el tren que lleva a los humanos capturados, y los liberan, pero los Infinitos les atacan, hiriendo a Soaron. Entonces Nate se une a ellos, a pesar de que Forja le ordenó quedarse al margen, y ataca a los Infinitos. Una de los refugiados, llamada Theresa, resulta ser una mutante, y sus poderes sónicos se activan por primera vez cuando ve que un Infinito trata de sorprender a Nate por la espalda. El grupo de Forja se retira para atender a Soaron, y Nate insiste en llevarse a Theresa con ellos. Luego, mientras viajan en su carromato, se encuentran con un caminante llamado Essex, que les dice que podría serles de ayuda.

Cíclope informa a Apocalipsis sobre la huida de Siniestro, pero Apocalipsis le dice que no le preocupa, pues Siniestro no es ninguna amenaza para él. Sin embargo, el Rey Sombra le dice a Apocalipsis que ha detectado a un nuevo telépata que se encuentra en el medio oeste de Norteamérica. Entonces Apocalipsis le encarga a Dominó que capture a ese nuevo telépata, y que lo mate si se niega a unirse a él.