Dama de Hierro

Cuando Reed Richards intentó construir mediante vibranium un sistema limpio de abastecer a la humanidad de energía casi ilimitada, Karen formó parte de los obreros. Sin embargo, se cayó accidentalmente en en una cuba de vibranium líquido, lo que causó una sobrecarga energética (y la consiguiente explosión de la planta), y le hizo quedar recubierta por una capa del mismo material. Este hecho hizo despertar la semilla celestial de Karen, dándole capacidad para moldear el vibranium a su gusto. Sin embargo, era incapaz de deshacerse de todo aquel vibranium que le recubría.

Poco tiempo después, Cráneo la obligó a formar parte de su ejército, y la bautizó como Dama de Hierro. Karen no era leal a Cráneo, pero defendía sus intereses pare evitar dolor al resto de sus compañeros del ejército de Cráneo.

Una vez muerto Cráneo y disgregado su ejército, participó en la construcción de la Antorcha Humana de Nueva York. Tras el surgimiento de la Iglesia de Inmortus, Karen renunció a permanecer en Nueva York y se trasladó a la corte del Rey Britania.

Allí fue conducida telepáticamente por Cable hacia la Tierra Salvaje, quien le enseñó a repolarizar en parte la Tierra, modificando la posición del vibranium del núcleo, y mostrándole como liberarse de su armadura. Se vio obligada a luchar junto con Dragón de Jade y el Caballero Negro para liberar a Magneto de la tiranía del Sapo.

Más tarde, utilizó sus recién encauzados poderes para encaminar el vibranium del Hombre Absorbente para repolarizar por completo la Tierra. Tras la destrucción de la Muerte, y como había prometido a Cable, dirigió a los Vengadores de Hierro en busca de los Eternos, encapsulados en vibranium en el espacio, ya que una de ellos, Sersi, era la única capaz de purgar de Cable el virus tecnorgánico que le atacaba.