Glory Garsen

Poco se sabe del pasado de Glory Garsen antes de su encuentro casual con Edwin Jarvis, mayordomo de los Vengadores. El encuentro se produjo cuando Nueva York se veía asolado por un ejército de demonios, durante los acontecimientos conocidos como Infierno.

Glory se encontraba junto a decenas de neoyorquinos viajando en metro, cuando el vagón enloqueció, y la puerta se abrió en mitad del trayecto, Glory se vio arrastrada se hacia el exterior. Afortunadamente para ella, en el mismo vagón de metro se encontraba Edwin Jarvis, mayordomo de los Vengadores (en ese momento en el paro), pero su amplia experiencia junto a los héroes, le permitieron reaccionar con mayor rapidez que el resto, y sujetó a Glory antes que cayera del vagón.

Posteriormente el vagón se detendría y de nuevo fue Jarvis quien condujo a los desorientados pasajeros a través del oscuro túnel, en dirección a la superficie. Ante los ojos de Glory, Jarvis se convirtió en un héroe, y tras presentarse y un primer intento infructuoso de coqueteo, decidió seguirle.

Sin embargo, incluso un leve paseo por la enloquecida Nueva York era arriesgado en aquel momento, dos coches cobraron vida y atraparon las piernas de Glory, y de nuevo Jarvis acudió en su ayuda, consiguiendo liberarla, fue entonces cuando la joven se confesó ante Edwin, admitiendo que le había seguido por considerarlo un hombre interesante y digno de conocer.

Este primer encuentro fue interrumpido por otro objeto inanimado, que arrasaba todo a su paso, tras poner a Glory a salvo, Edwin intentó detener al monstruo, pero ni toda la voluntad de Jarvis pudo detenerlo, y finalmente el fiel mayordomo fue atrapado, y hubiera muerto aplastado de no haber mediado la oportuna intervención del Capitán América (en aquel momento el Capitán), que salvó a Jarvis, Edwin explicó al Capitán los extraños sucesos que estaban asolando la ciudad, y el héroe marchó dispuesto a reunir un nuevo grupo de Vengadores para hacer frente a la amenaza.

Glory se mostró mas admirada por Edwin aún si cabe, y no dispuesta a dejarlo escapar, lo convenció para que la acompañara a casa, comenzando entre ellos una gran amistad y una relación (suponemos que de noviazgo, aunque tratándose de Jarvis, nunca se sabe).

La relación entre Glory y Jarvis era todo lo estrecha que las obligaciones del mayordomo, y su lealtad hacia los Vengadores le permitían, aunque no parece que la relación se resintiera en absoluto, iban al cine, al teatro, a cenar.... En una ocasión Jarvis la llevó a una cena que celebraba una de las Vengadores, Sersi, desgraciadamente, tanto Edwin como el resto del equipo de mantenimiento de los Vengadores fueron sometidos a un lavado de cerebro por parte de Madre Noche y el Ministro Sangre, que les hicieron creer que los enemigos de los Vengadores intentaban atacar al grupo.

Mediante la hipnosis, Jarvis y el resto del grupo creyeron que todos los asistentes a la fiesta eran enemigos de los Vengadores, de hecho, Jarvis creyó que Glory era Capucha Carmesí y se dispuso a dispararle con una pistola que los villanos le habían proporcionado, afortunadamente, la Visión descubrió el plan y pudo sabotear las armas, impidiendo que ni Glory ni los demás invitados resultaran dañados. Finalmente los villanos fueron capturados y Jarvis y los demás recuperaron la normalidad, por suerte para Edwin, Glory no le guardó rencor por haber intentado matarlo.

Ambos continuaron la relación, aunque esta pasó por una crisis cuando la mayoría de los Vengadores desaparecieron durante la crisis conocida como Onslaught, Jarvis se sumió en una profunda depresión, sin salir de casa, comer o dejarse visitar por nadie, Glory permaneció junto a él hasta que, para alegría de Jarvis (y Glory) se produjo la vuelta del grupo lo que sacó a Edwin de su depresión.

Aparentemente, en la actualidad Glory y Jarvis continúan juntos, y la relación parece mas estable que nunca.