Príncipe Cíclope

El Príncipe Cíclope estaba prometido con la Princesa Jean, por quien profería un profundo amor. Pero su vida dio un vuelco cuando su prometida sucumbió al poder maligno del Fénix Oscuro, una poderosa fuerza primordial. Simplemente por maldad, el Fénix Oscuro maldijo al Príncipe Cíclope causándole que por sus ojos saliera un rayo mortal, por este motivo se veía obligado a llevarlos ocultos bajo su turbante.

Sin embargo, lejos de desistir, el Príncipe Cíclope y su leal compañero y consejero Xavier el Mago emprendieron un largo viaje para encontrar la forma de restablecer a la Princesa Jean, cuya alma inmaculada tenían guardada en una esfera de cristal. En el Califato de Nhu Yorkh fueron asaltados por un grupo de bribones mientras estaban en el muelle buscando una embarcación. La Pirata Kitty y su compañero el fornido Coloso acudieron en su ayuda. Gracias a ellos enseguida se deshicieron de los agresores y, al escuchar tan triste historia, los piratas decidieron ayudarlos. En ese preciso momento el Fénix Oscuro los atacó destruyendo todos los barcos del puerto y sólo pudieron ahuyentarlo gracias al poder del alma de Jean. Kitty llamó entonces al dragón Lockheed y todos juntos se pusieron en marcha. Tras detenerse brevemente en una isla en medio del mar se les unió la Jinete de los Vientos, el Demonio Sin Nombre y un singular bamf. Todos sobre los lomos de Lockheed no tardaron en ser atacados de nuevo por Fénix Oscura. Durante la batalla por una mala maniobra del Demonio Sin Nombre, el Príncipe y todos aquellos que no podían volar se precipitaron al vacío, pero la Jinete del Viento creó una silla voladora para el Príncipe. Tras un ataque conjunto contra Fénix, finalmente el Mago logró lanzar la fuerza vital de Jean contra el enemigo que logró exorcizar su cuerpo y expulsar al ser primigenio. De nuevo juntos los dos amanes se fundieron en un profundo abrazo.

De regreso a su reino los príncipes se casaron y vivieron felices hasta el fin de sus vidas.