Arbol Ardiente

Arbol Ardiente era un shamán cheyenne que prentendía alzar en armas a su pueblo contra Fuerte Rango sabiendo que eso provocaría que los indios serían expulsados de sus tierras. De esta forma podría quedarse con el territorio vacío. Para ello robó la Piel del Búfalo Blanco, una reliquia de la tribu, y culpó a los soldados de Fuerte Rango de su desaparición. Johnny Wakely descubrió el complot, por lo que intentaron silenciarlo y lo arrojaron por un terraplén que daba a un cementerio indio dándolo por muerto. Wakely sobrevivió a la caída y fue contactado por Owayodata, el Dios Lobo, que le concedió los poderes del Lobo Rojo para hacer frente a la amenaza. Como Lobo Rojo descubrió donde habían ocultado la Piel del Búfalo Blanco y la presentó justo en el momento en el que Búfalo Blanco, el jefe indio, estaba parlamentando con el mayor Sabre Brent del Fuerto Rango. Descubierto y sin poder huir, Arbol Ardiente quedó bajo la custodia de los cheyennes que lo juzgarían por su traición y supuestamente lo expulsarían de la tribu. Pese a su situación, Arbol Ardiente prometió vengarse de Lobo Rojo.