Tierra-96190

La Tierra-96190 es una realidad divergente de la Tierra-616, las dos tienen un pasado en común hasta que un suceso concreto provoca que el destino sea diferente. En ambas Tierras, los jóvenes Scott y Alex Summers volaron en un avión particular junto a sus padres y en ambas Tierras, fueron testigos de la llegada de una nave Shi'ar la cual, para que no pudieran delatar su presencia, intentaron derribarlos, tras unos segundos esquivando los ataques de la nave alienígena, Christopher comprendió que no podría seguir así mucho tiempo y ordenó a su mujer que colocara a sus hijos el paracaídas y los pusiera a salvo. Es aquí donde el destino diverge, puesto que si bien en la Tierra-616 Ann siguió las órdenes de su marido y colocó el paracaídas a sus hijos para que pudieran saltar del avión, en la Tierra-96190 sin embargo, no se atrevió ya que pensaba que era arrojarlos a una muerte segura.

Con el destino de su familia en juego, Christopher redobló sus esfuerzos para escapar y logró realizar un aterrizaje de emergencia y los Summers lograron abandonar el avión y esconderse antes de la llegada de la nave shi'ar. Los alienígenas rastrearon a los humanos pero no pudieron encontrarlos y se marcharon del lugar de modo que los Summers quedaron a salvo, aunque el recuerdo del ataque alienígena provocaba pesadillas y puntuales ataques de terror en Scott.

Pasado un tiempo, los dos niños crecieron y fueron a la escuela, allí, Scott adquirió cierta popularidad por su desparpajo, su habilidad en los deportes y en los estudios mientras que Alex creía a la sombra de su hermano. La frustración de Alex aumentaba con el tiempo, en el colegio era considerado el hermano torpe de Scott y en casa todas las atenciones eran para el brillante hermano mayor, todo esto pareció cambiar cuando una noche los poderes mutantes de Scott se manifestaron en forma de un poderoso rayo óptico que atravesó la pared mientras dormía y tras sufrir una pesadilla.

Pero en vez de mejorar la situación de Alex, esto parece que lo empeoró, ahora todos los esfuerzos de su familia se centraban en ayudar a Scott para intentar que aprendiera a controlar sus poderes aunque todos los intentos eran en balde. Frustrado, Alex se refugió en su escondite secreto, un granero abandonado cerca de allí, fue en el granero donde se encontró a un extraño ser, Hank McCoy (en su versión de la Bestia Oscura), que se ganó la confianza de Alex a fin que en un momento dado, trajera a su hermano Scott hasta él para usarlo para sus propios fines. La Bestia Oscura convenció a Alex para que se convirtiera en el guardián de su hermano y lo protegiera de todos los peligros, pero paradójicamente fue Scott quien salvó a Alex mientras practicaban escalada y Scott pudo controlar sus rayos ópticos lo suficiente para salvar a su hermano de la muerte.

Mientras, los padres de Scott y Alex habían contactado con el Profesor Xavier, que era el director de una Escuela especial donde un reducido grupo de alumnos podían realizar sus estudios. Seguramente el propio Xavier se había puesto en contacto con los Summers después que descubriera la condición de mutante de Scott, pero en la reunión que Xavier mantuvo con Scott, el joven, que todavía seguía negando su condición y solo quería ocultarlo, se mostró abrumado cuando Xavier demostró que conocía su secreto y huyó perdiendo así la mejor oportunidad que nunca tendría para controlar sus poderes.

Deseando ayudar a su hermano, Alex lo llevó a su granero para presentarle a la Bestia, pero enfrentado a la visión de la Bestia Oscura, Scott revivió los viejos recuerdos del ataque de los Shi’ar y se encogió aterrorizado, al ver a su hermano, la estrella del deporte, el genio de los estudios, el chico de oro del instituto, aterrorizado ante McCoy, Alex manifestó sus poderes mutantes y los usó para separar a la Bestia de su hermano. Entonces Alex le dijo a Hank que haría lo que él quisiera, que obedecedería todas sus órdenes pero que dejara en paz a su hermano. La Bestia Oscura tomó a Alex bajo su mando, convirtiéndole en uno de sus lacayos para sus propios planes de manipulación genética, mientras que Scott por su parte se enfrentaba a un futuro incierto en el que el simple hecho de abrir los ojos podía provocar que matara a alguien con sus descontrolados poderes.