Sir Guy Cross-Wallace

Sir Guy Cross-Wallace era un adinerado aristócrata obsesionado con el juju, la magia africana. Quería fortalecerse con ella y dominar África. Cross-Wallace tenía contactos en el tráfico de diamantes y logró financiar sus actividades obteniendo dinero de Dubose Wilson. Para introducir la mercancía clandestinamente en Europa usaba animales, guardando los diamantes en su estómago. En París intentó conseguir estatuas ceremoniales africanas del traficante de arte Marcel, en Londres mató a varios animales en un zoológico arrancándoles los cuernos a colmillos y sacándoles el estómago y en Zaire armó a guerreros tradicionales con armas de asalto {M/CP 68/2}. Sus actividades atrajeron la atención de varias personas, Dubose Wilson, a quien nunca entregó sus diamantes y Shanna la Diablesa por matar a los animales de Londres. Los dos lo siguieron hasta el Zaire donde asaltaron la mansión que allí tenía. Akulia la vidente y hechicera africana de Cross-Wallace le advirtió del peligro que corría. Al verse atrapado, el hombre la asesinó para obtener su fuerza y tal vez no dejar testigos y logró escapar {M/CP 70/2}.

Cross-Wallace se refugió en la fortaleza que se había construido con la ayuda de contrabandistas en medio de la jungla, dejando una estela de indígenas muertos a su paso y secuestrando a niños y mujeres para sus ceremonias de magia negra. Wilson y Shanna, a quienes se les unió el fotógrafo Eric Heller y al guarda de la Reserva de Katavi, Jeremy Mchele, fueron tras él. Pero cuando se encontraban cerca de su fortaleza, sus hombres lograron capturar al fotógrafo. Cross-Wallace le instó a decirle todo lo que sabía sobre sus compañeros, pero al negarse hizo que lo recubrieran de arcilla y mandó cocinarlo sobre las llamas {M/CP 73/2}. Los compañeros del fotógrafo no tardaron en ser también capturados y conducidos al interior de la fortaleza. Cross-Wallace estaba obsesionado con Shanna, de quien cuya fuerza quería apropiarse. Para ello la obligó a participar en una ceremonia de matrimonio bajo la amenaza de matar a los otros prisioneros, pero cuando sirvió como banquete el cuerpo cocinado del fotógrafo, Jeremy Mchele enloqueció y arrebató un arma a un guardia disparando a lo loco {M/CP 74/2}. Aunque Mchele fue abatido por las balas, Shanna logró escapar y Cross-Wallace envió tras ella a sus guerreros {M/CP 75/2}. Pese a todos sus esfuerzos y la ayuda de la vidente Mlima, Shanna logró eludir a sus perseguidores {M/CP 76/2}. Creyendo que no tardarían en capturar a su enemiga, Cross-Wallace se preparó para el ritual con el que bebería la sangre de su enemiga, pero Mlima, quien supo que Cross-Wallace había asesinado a su hermana, lo traicionó y dejó que su jefe quedara sin protección. El hombre se enfrentó a Shanna, pero la ágil guerrera poseía por la fuerza de su pantera negra asesinada por los hombres de Cross-Wallace logró sobreponerse al feroz ataque de su enemigo y lo mató clavándole una estaca de madera en el estómago {M/CP 77/2}.