Hombre Gigante

Sam Willson vivía en la Norteamérica gobernada por el Presidente Rogers, un héroe de guerra que era reelegido presidente una y otra vez. Desgraciadamente, Rogers era en realidad el Cráneo Rojo disfrazado y continuaba con sus ideales racistas de modo que aquellos que no cumplían su ideal de raza aria, como era el caso de Willson, eran apartados de cualquier empleo honesto y si alguno se pasaba de la raya, era enviado a un campo de exterminio. Obligado a robar para sobrevivir, Sam entró a robar en una casa de una familia acomodada en Leonia, Nueva Jersey, se trataba del hogar de Hank Pym, un bioquímico de éxito, y su esposa. Pym había creado unas cápsulas que permitían cambiar de talla a voluntad y por tanto se había convertido en un peligro para el orden establecido por lo que el Cráneo Rojo envió unos asesinos que mataron a Pym y su esposa.

La llegada de Wilson a la casa de los Pym coincidió con la del grupo liderado por el verdadero Steve Rogers y sus aliados que venían a reclutar al bioquímico y sorprendieron a Sam robando. Cuando el Capi se dio cuenta de la integridad de Wilson aceptó que se uniera a su grupo dándole unas cápsulas de crecimiento con lo que Sam adoptó el sobre nombre de Hombre Gigante. Junto a ellos marchó a Nueva York, al Condado de Weschester donde se encontraba la Academia de Magnus para Jóvenes Talentos, un lugar donde se entrenaba a mutantes en el uso de sus poderes pero allí descubrieron que SHIELD se les había adelantado y asesinado a todos los estudiantes.

Sin poder reclutar mas miembros, el Hombre Gigante y sus compañeros decidieron invadir el Helitransporte, el cuartel general de SHIELD, que era donde se fabricaba y almacenaba el Suero del Super Soldado que dotaba de poder a los agentes del Cráneo Rojo. En el Helitransporte el Hombre Gigante y sus compañeros obtuvieron un poderoso aliado al rescatar a Thor pero pese al enorme poder del Hijo de Odín y sus aliados, no podrían prevalecer en un lugar repleto de super soldados por lo que Sam y sus compañeros decidieron que ellos mantendrían ocupados a los agentes de SHIELD mientras el Capi llegaba a la Bóveda del Suero, el lugar donde se fabricaba el Suero del Super soldado que daba su poder a los agentes de SHIELD.

Mientras el Capi luchaba por abrirse camino, el Hombre Gigante y sus compañeros luchaban valientemente hasta que abrumados, perdieron toda esperanza. Entonces regresó el Capitán América que les informó que el Suero había sido destruido, el Cráneo Rojo eliminado y que ahora el país no tardaría en ser libres. Sabedores que habían conseguido liberar América, Sam Wilson y los Vengadores se volvieron contra la oleada sin fin de enemigos que se alzaba contra ellos y se lanzaron a un ataque suicida en que ninguno sobrevivió.