Reina Elfa

Linnea la Reina Elfa es una hechicera que vivía junto a su marido, el guerrero Gorn, en una civilización desaparecida hace varios siglos. Al ser acusada de brujería, se recluyó junto a su marido en un valle boscoso en lo que en la actualidad es el estado de Virginia, en los Estados Unidos. Allí, gracias a sus poderes mágicos, el matrimonio vivió durante siglos, protegidos del exterior por las ilusiones creadas por Linnea.

Con el paso del tiempo, Gorn se aburrió de su vida ociosa, y echaba de menos el combate, por lo que convenció a su esposa para abandonar su refugio y ambos se dirigieron hasta la ciudad de Washington D.C. Allí se sorprendieron de los cambios que habían ocurrido en la humanidad, y se dieron cuenta de que no podían comunicarse con nadie pues el idioma había cambiado tanto como la sociedad. Debido a varios malentendidos, Gorn participó en un altercado con la policía, del que fue rescatado por Linnea. La hechicera trató de convencer a Gorn para regresar a su hogar, pero él, furioso, la golpeó, y ella entonces lo abandonó a su suerte en la ciudad.

Gorn no tardó en encontrarse con más problemas, y acabó siendo disparado y muerto por un policía. La Reina Elfa sintió su muerte y apareció junto al cadáver de su marido. Entre lágrimas, la hechicera descargó su furia contra la policía y la población de la ciudad, atrayendo la atención de los Vengadores, que trataron de detenerla. Sin embargo, los héroes pronto se dieron cuenta de que la hermosa mujer era un enemigo más poderoso de lo que parecía, pues con unos pocos hechizos se deshizo de Thor, Iron Man y Tigra. El Capitán América trató de calmar a la Reina Elfa para detener la pelea pacíficamente, pero Chaqueta Amarilla, que por entonces atravesaba una crisis emocional, la atacó por la espalda cuando ella ya había detenido su ataque. Eso hizo que Lienna reanudara su ataque contra Chaqueta Amarilla, que solo pudo sobrevivir gracias a la intervención de su esposa la Avispa. Afortunadamente, el Capitán América consiguió calmar a la Reina Elfa de nuevo, y ella, viendo en el Capitán un reflejo de su difunto esposo, decidió abandonar la civilización y regresar a su refugio {A 212}.