Wonder Man vol 2

Simon se enfurece y ataca con fuerza a Clarke al ver a su amigo caído, pero mientras lo hace el resto de los Jinetes de la Recesión agarran a Hank, que permanece inconsciente, y se lo empiezan a arrojar los unos a los otros, hasta que Jim realiza un pase demasiado alto y Hank se precipita al vacío. Simon sale volando y logra agarrarlo antes de que golpee el suelo y lo escuda con su cuerpo. Con su amigo herido entre sus brazos reta a cualquiera de los Jinetes a detenerlo y se marcha para llevar a Hank a un hospital. Paco quiere ir tras el Hombre Maravilla, pero Clarke se lo impide.

Simon lleva a Hank al hospital, aunque sigue inconsciente su naturaleza mutante hace que el pronóstico de la doctora que lo atiende sea favorable. Ginger y Araña han acudido al hospital al escuchar el incidente en las noticias para ver si se encontraba bien. Simon le reprocha su entusiasmo y la frivolidad con la que habla de su amigo herido. Cuando llega también Alex, Simon se harta y se marcha al pasillo para intentar irse volando, pero las ventanas del hospital no pueden abrirse para evitar los suicidios. Alex le da alcance y se disculpa con él y le dice que solo estaba preocupada. Simon le agradece su interés y se dan la mano antes de que se marche para buscar a los Jinetes de la Recesión.

Varios helicópteros de la policía se acercan hacia el edificio donde se encuentran los Jinetes de la Recesión. Clarke tranquiliza a sus compañeros y les dice que van a causar unos cuantos destrozos, de esta forma ganarán publicidad y les será fácil vender sus servicios a otros países que quieran invertir en tecnología avanzada. August no está muy convencido de ello, pero decide seguirle el juego a Clarke. Mientras derriban varios helicópteros llega el Hombre Maravilla completamente enfurecido. Con facilidad derriba a cuatro de los Jinetes de la Recesión, pero August y Ronnie deciden huir. Rampante se enfrenta en persona al Hombre Maravilla, pero no es rival para él y éste termina rompiéndole en traje y derrotándolo. Simon se marcha preocupado por Hank que todavía no había recuperado la conciencia cuando se marchó del hospital.