Incredible Hulk vol 2

Decenas de soldados se preparan para la llegada de un nuevo "invitado". Se trata de Bruce Banner, recién llegado de otra dimensión junto a los Vengadores y a los 4 Fantásticos. El General Ross y la Coronel St. Lawrence deben hacer frente a las preguntas de otros altos mandos militares que preguntan porque no lo fusiló al instante, o al menos porque no lo ha mantenido sedado, Ross les contesta que ha llegado la hora de un cambio de actitud respecto a Hulk, en lugar de intentar perseguirlo, cazarlo, capturarlo o ejecutarlo van a darle lo que quiere, pero deben hacerlo de manera cuidadosa ya que si Hulk dando lo que quiere para sus propios intereses, estarán como al principio.

Los Troyanos dirigidos por Armageddon han invadido Feudo Franco y lo usan como base para localizar a Hulk para llevar a cabo sus planes. Después de varias semanas en que no daban con él, por fin ha aparecido y Armageddon da los pasos necesarios para capturarlo.

Betty va a visitar a su marido a la celda especial donde lo mantienen retenido, ambos se funden en un apasionado abrazo pero la transformación en Hulk rompe el idílico momento, Betty no pierde la calma y echa en cara a Hulk sus últimas palabras, en que afirmaba que no la había visto en su vida, para no enfrentarse a la mujer, Hulk decide irse y ante su sorpresa, los militares no intentan detenerle, es mas, la Coronel St. Lawrence le espeta a que haga lo que quiera puesto que no pueden detenerlo. Hulk sale de la celda, y se encuentra a unos soldados, pero estos ni siquiera se inmutan ante su presencia, siguen hablando de sus cosas y no intentan detener al coloso esmeralda el cual, furioso, clama que no lo mantendrán encerrado. Entonces llegan St. Lawrence y Ross, que vuelven a repetir que no tienen intención de retenerle, que pude irse cuando quiera y el general promete que le encontrará un lugar deshabitado donde nadie le moleste y donde pueda estar con él, separado no solo de los que le odian y le persiguen sino también de aquellos que le aman. Sorprendido por este cambio de actitud, pero no estando dispuesto a parecer débil, Hulk llega a una solución consigo mismo y afirma que hará lo que le apetezca y ahora mismo le apetece quedarse en el Area 102.

Doc Samson y Gyrich interceden ante el Presidente de los Estados Unidos, en un intento por persuadirle para que otorgue a Banner un perdón presidencial por sus delitos pasados, sin embargo el Presidente teme otorgar el perdón a Hulk, y que después este vuelva a enloquecer es un suicidio político y se niega a transigir.

Bruce se pone en contacto con sus viejos amigos, Tony Stark y Reed Richards, a los que pide ayuda para fabricar un exoesqueleto para ayudar a Rick Jones a volver a caminar, a continuación, pide a los militares permiso para ir a San Francisco a visitar a su amigo y estos, en su nueva política de tratar a Hulk de forma positiva, no solo lo permiten sino que ponen un avión militar a su disposición.

Bruce y Betty visitan a Rick en el hospital, para tranquilidad de Banner, Rick no recuerda cómo se produjo las heridas que le han dejado paralítico pero sabe que tarde o temprano tendrá que enfrentarse al hecho que fue él quien le causó las heridas. En ese momento, un estruendo enorme provoca un temblor en el hospital, se trata de un grupo de robots troyanos gigantes que capturan a Bruce. Este tranquiliza a sus amigos ya que confía en que en breve se producirá la transformación en Hulk y que este le salvará, pero para su sorpresa, el coloso esmeralda se niega a aparecer, afirmando que "nadie le dice a Hulk lo que debe hacer", dejando a Bruce indefenso ante cinco enormes robots.