Friendly Neighborhood Spider-Man vol 2

Leilani se reúne con sus hijos en la azote al edificio de Peter. Los ha estado cuidando la Antorcha Humana, quien tiene listas vendas y analgésicos para curar el disparo que ha recibido Spiderman. Rumor insiste en que deberían prepararse para la llegada de los underyorkinos, así que Spiderman llama a la Detective Sebbens para pedirle ayuda. Un PEM apaga la luz de toda la manzana cortándose la comunicación. La Detective Sebbens le dice a su capitán que ha recibido un aviso anónimo de que se va a producir un ataque en la Calle Water, pero su superior le dice que tienen órdenes de no intervenir. Sebbens le pregunta si ahora sirven y protegen hasta que alguien les dice que no y se marcha igualmente. El gobernante de Under-York aparece y amenaza con derruir los edificios si no le entregan a su hija y nietos. Spiderman le agarra el megáfono y responde que Leilani no quiere ir con él. Los underyorkinos empiezan a disparar, pero Spiderman le arrebata las armas. Furioso el gobernante lo ataca, pero Rumor lo detiene. Junto a ella hay un montón de vecinos que la respaldan, entre los que están Gracie y Miguel. Antes de que la cosa pueda escalar más aparece la Detective Sebbens. El gobernante se defiende diciendo que tiene inmunidad diplomática. También aparece el alcalde Wilson Fisk. Cuando pide a Spiderman que entregue a los underyorkinos, el héroe asegura que se han ido. Entonces agarra el megáfono y agradece a Fisk públicamente que venga a defender la ciudad. Fisk decide seguirle la corriente y pide al gobernador de Under York que se marche. Acabada la amenaza, Spideman se reúne con Leilani en el interior del edificio. La mujer le agradece lo que ha hecho. No mucho después se cambia en la azotea y regresa a su cuarto como Peter para descansar, pero lo está esperando Tía May quien le dice que tiene que decirle algo.