Diatrymas

Las Diatrymas eran unas monturas utilizadas por los guardianes del Palomar. Se ignora el orígen de estos animales, de aspecto aviar aunque sin la capacidad de volar, es posible aunque no esté comprado que sean producto de la ingeniería genética de los científicos del Palomar, lo que si se conoce es que están dotados de barras capaces de destripar a un hombre de un solo zarpazo po partirle el cuello como si fuera una rama, además estaban dotadas con la capacidad de correr a velocidades superiores a los 80 kilómetros por hora.

Las Diatrymas eran utilizadas como monturas para la caballería que protegía la base en la montaña, que servía de refugio a hombres acaudalados, los salvajes seres habían sido entrenados para obedecer ciegamente a su jinete de modo que no obedecían las órdenes de ningún otro.

Cuando el Capitán América intentó invadir el Palomar, para rescatar a la joven telépata de nombre Nevada, los dirigentes del lugar enviaron contra el aventurero primero a sus jinetes alados y cuando estos fueron incapaces de derrotar al Capi, enviaron a su caballería formada por jinetes montando Diatrymas, que sorprendieron al Capi después que este se introdujera accidentalmente en un campo de minas.

Con el aventurero atrapado, el líder del grupo le ordenó rendirse y abrió un camino para salir del campo minado, pero cuando el héroe salió de su encierro, derribó al jinete de su montura y se montó en la Diatryma en un intento de escapar, aunque dado que las monturas solo obedecían a sus jinetes, el Capitán América fue rápidamente derribado. Obligado a correr por su vida, el Capi corrió perseguido por los jinetes que dirigieron a sus Diatrymas tras el héreo para

acabar con su vida, aunque el aventurero logró engañarlos, conduciendo a jinete y montura hasta el campo de minas de modo que aunque él fue capaz de frenar, las Diatrymas iban a mayor velocidad (recordemos que podían alcanzar los 80 kilómetros por hora) y no pudieron detener su carrera, entrando en el campo de minas que explosionó bajo sus pies provocando su destrucción.

Es probable que todos los Diatrymas murieran como consecuencia de la explosión puesto que no han vuelto a tenerse noticias de la existencia de ninguno mas.