Strange Tales vol 2

Puñal no entiende que está ocurriendo, solo que está siendo perseguida por sombras vivientes y hace lo que puede para huir de ellas. Por un momento cree que pueda tratarse de una pesadilla, pero es una vacua esperanza, así que no le queda otra que preguntarse donde está su compañero y seguir escapando.

Capa sigue atrapado por la atadura mística de Míster Jib, quien se congratula de su sufrimiento. Lo deja allí con una pantalla en la que se ve como castiga a Puñal por entrometerse en su camino en el pasado. Pero tiene otras marionetas que manipular y lo deja allí prometiéndole que quizá regrese para aumentar su sufrimiento.

Es tarde en la noche pero los necesitados no tienen horario. Cuando Phillip entra en el St. Anne encuentra al Padre Mike ayudando a un drogodependiente. Phillip no ha podido dormir pensando en su hijastra, pero Mike le pregunta si lo que quiere es ayudarla o tenerla cerca para vigilarla, si no es que eso le hará sentir mejor por todos los años que él y su hermana se desentendieron de ella. Mike le dice que cuando conozca mejor a su hijastra se dará cuenta que es una chica extraordinaria.

Nales revisa las notas de las investigaciones de O'Reilly, ella es la única capaz de leer la mala letra de su amiga. En ellas encuentra referencias a Capa y Puñal, así como a la Iglesia del Espíritu Santo, por ello decide ir a investigar.

Puñal se pregunta que hace huyendo si tiene unos poderes extraordinarios y se da la vuelta para enfrentarse a las sombras. Cuando empieza a dispararles con sus dagas de luz, las criaturas se vuelven huidizas, pero cuando sale en su persecución, Puñal se encuentra cara a cara con Noche.

Capa se da cuenta que por la fuerza no podrá liberarse de sus ataduras, así que intenta concentrarse en su oscuridad interior. De pronto desparece. Míster Jib no puede creer que haya logrado escapar y está seguro que no lo ha podido hacer sin ayuda externa.

Capa parece en medio de un pentagrama dibujado en la habitación de un niño, quien con un libro de ocultismo abierto entre sus piernas proclama haberlo invocado como un demonio esclavo a su servicio.