Marvel Comics Presents vol 1

Lobezno derriba la puerta de entrada con sus garras y Sean y su padre lo siguen. En el interior la tensión entre Sean y Lobezno crece y están a punto de pelearse pero aparece el Motorista Fantasma y los separa. Yuji decide que ha llegado el momento de aclarar las cosas y se sientan para que Sean les explique su pasado. Al poco rato aparecen más mercenarios de Mirada Mortal y la pelea se reanuda. El Motorista Fantasma llama a su moto y sube en ella a Sean.

Shanna entra en la tienda de un importador de productos africanos que trabaja para Cross, al verla entrar, la secretaria hace amago de llamar a la policía, pero el encargado la detiene y saca un arma, pero Shanna cruza como un relámpago la habitación y lo tira al suelo y le advierte que sabe que han sido ellos quienes han causado la masacre en el zoo y le advierte que no avise a su jefe, Cross-Walance. Tal como esperaba que hiciera, nada más marcharse el hombre llama a Cross, quien se ve obligado a interrumpir un conjuro de buena suerte ejecutado por Akulia. Lo que salva a un cachorro de tibre blanco de ser sacrificado. Cuando Shanna llega a la habitación en la que se encontraba Cross, éste hace tiempo que la ha abandonado, pero encuentra numerosos rastros que permiten ver lo lejos que ha llegado realizando magia africana.

Un hombre venda la herida que Heller se ha hecho en la mano después del desprendimiento al que ha sobrevivido, que el hombre intenta pasar por un desafortunado incidente. Heller sabe que no lo ha sido y así se lo dice, pero el minero le aconseja olvidarse de la investigación del tráfico de diamantes. Tras marcharse, una enfermera impide que Heller se tome las pastillas calmantes y le advierte que son en realidad veneno y le insta a escapar de allí. A penas ha dejando la tienda de campaña donde está siendo atendido alguien mata a la enfermera, así que Heller desaparece de allí huyendo a través de la jungla. Poco después, Heller logra pagar a un pescador para que lo lleve hasta Tanzania cruzando el Lago Victoria pese al peligro que supone para él llevar a alguien a quien persiguen los traficantes de diamantes.

Wilson está negociando la llegada de un lote de diamantes desde Londres en las calles con el representante de una banda de crack, cuando se les acerca un coche y abre fuego contra él amenazándolo por no haberles pagado lo que les debe. Wilson logra escapar con vida, pero temiendo que vuelvan tras él pide ayuda a Ice para conseguir el dinero necesario para salir del país. La única posibilidad que ve para salir del atolladero en el que se encuentra es ir a hablar con el gran jefe.

Jeremy Mchele camina por la llanura de la reserva pensando en todos sus hombres que han sido asesinados. Está decidido a ir tras los asesinos que han causado sus muertes.