Avengers vol 8

Tras haber derrotado a la Hueste Final, enfurecido Thor busca a Loki, quien se vanagloria de haber sido el dios que acaba de reunir a los Vengadores. Pero antes de que pueda ponerle las manos encima, los Celestiales se lo llevan prisionero. Como muestra de agradecimiento usan el cuerpo del Progenitor para crear con él la Montaña de los Vengadores.

Gabe llama a su hermano Robbie, quien se dirige hacia la base de los Vengadores, para contarle lo contento que está de entrar en el programa extra-escolar de Pantera Negra. Robbie llega hasta la Montaña de los Vengadores. Los sensores detectan su presencia y le conceden permiso para entrar. Ya en el interior se encuentra con el Capitán América, quien le da la bienvenida y no pierde el tiempo para empezar a entrenarlo. T'Challa muestra el interior de la base a Tony Stark, los mejores arquitectos de Wakanda llevan días trabajando junto a técnicos de Alpha Flight para hacer habitable el interior del Celestial Alfa muerto hace cuatro millones de años. En una sala médica el Doctor Extraño examina a Hulka, quien tras deshulkizarse ha cambiado físicamente y ahora es grande como cuando tenía su forma de Hulka anterior. Extraño le informa que ahora su cuerpo almacena más energía gamma que nunca, y al parecer a veces es capaz de liberarla de forma explosiva, lo que podría explicar los cambios en su físico y el aumento de nivel de poder. Thor se pasa por ahí, anda buscando un baño, así que Jennifer lo invita a su cuarto. Extraño anuncia a T'Challa que no va a quedarse en la formación, tiene asuntos propios que atender, pero si lo necesitan estará disponible. En otro punto de la base, Tony invita a Carol a quedarse con el grupo y termina convenciéndola para que acepte, si bien el encuentro es un tanto accidentado al afirmar que hay una tensión sexual entre ellos. Algo más tarde, el grupo se reúne, hay una alerta de un incidente internacional de nivel 9 en el Océano Antártico. Así que el grupo se pone en marcha.

Un grupo de atlantes aborda un barco ballenero de Roxxon, pero la tripulación está armada y los mata acribillándolos. Como si fueran sanguinarios trofeos, cuelgan sus cadáveres por la borda, pero de pronto emerge del agua un calamar gigante que atrapa a varios hombres. Junto a la bestia está Namor dispuesto a vengar a los suyos.