Robards, Jeth

Jeth Robards fue contratado en circunstancias desconocidas por Klaw, el amo del sonido (aunque Robards desconocía la verdadera identidad de su contratador), para que marchara junto a Nathan Kumalo hasta Wakanda para hacerse con un aparato fabricado por Pantera Negra, el Vibrotron, que aumentaba el poder del Vibranium. Ambos, Robards y Kumalo, alquilaron una avioneta y se dirigieron a Wakanda donde fingieron un accidente que provocó que se estrellaran en la jungla africana, pronto, personal de Wakanda acudió al lugar del accidente y llevaron a Jeth y su compañero hasta la capital donde T'Challa les acogió y proporcionó cuidados y atenciones sin saber cuales eran las verdaderas intenciones del duo.

Y es que Robards y su compañero aprovecharon la llegada de la noche para hacerse con el Vibrotron y escapar de la capital, logrando alcanzar la vecina Rudyarda antes que los wakandianos pudieran darles caza. En circunstancias normales, Wakanda hubiera pedido la estradición de los ladrones pero era Rudyarda un pais regido por un gobierno racista que consideraba a la raza negra como inferior y por ello las relaciones con sus vecinos era cuanto menos, tirante, es por ello que T'Challa decidió infiltrarse en Rudyarda para encontrar a los ladrones por su cuenta pero fue detenido por las autoridades que lo encerraron en una de sus prisiones, cuando no tuvieron noticias de su líder, las autoridades de Wakanda pidieron ayuda a los 4 Fantásticos que enviaron a la Cosa y la Antorcha Humana para rescatar a su amigo.

Lo que no sabían es que los ladrones se habían separado, puesto que Robards había traicionado a su camarada, robando el Vibrotron y marchando a reunirse con su misterioso benefactor para quedarse él con todo el dinero, sabiendo que Kumalo, por su condición de hombre de color, no acudiría a las autoridades. Jeth acudió al lugar de la cita, siendo sorprendido por los héroes americanos y por Pantera Negra (al que habían sacado de prisión), sin embargo en ese momento llegó al lugar Klaw a bordo de su nave y se enfrentó a los tres héroes, momento que intentó aprovechar Robards para huir con el artefacto, en la nave en la que había llegado Klaw, sin embargo el Amo del Sonido no estaba dispuesto a permitir que su esbirro le abandonara llevándose el arma que anhelaba y disparó un rayo sónico que destruyó la nave acabando con la vida de Robards.