Vera Cantor

Vera era una joven que trabajaba a tiempo parcial en una biblioteca pública de Nueva York. Un día, su compañera de piso Zelda le concertó una cita a ciegas con un amigo de su novio Bobby, y así conoció a Hank McCoy. Aquella primera cita no fue demasiado bien, pues acabó con Hank peleándose con un joven llamado Calvin Rankin. Sin embargo, a partir de entonces, Vera y Hank comenzaron una relación sentimental, y salieron varias veces en compañía de Zelda y Bobby {UX 19~ 47}.

Tiempo después, Vera comenzó una relación sentimental con Calvin durante unas vacaciones en Canadá, solo para descubrir que su nuevo novio era mutante y sus poderes descontrolados ponían en peligro la vida de todos los que le rodeaban. Acudió a Nueva York, y pidió ayuda a Hank por sus conocimientos científicos, que ahora trabajaba para la Brand Corporation. Hank accedió a acompañarla, y juntos volvieron a Canadá, aunque su viaje sufrió un retraso por culpa del Juggernaut. Antes de llegar al lugar donde estaba Calvin, Hank le reveló a Vera que era la Bestia, un mutante perteneciente a la Patrulla-X, y que recientemente había sufrido un accidente por el que su cuerpo se había transformado, adquiriendo un aspecto simiesco de pelaje azul. Cuando ambos llegaron junto a Calvin, Hulk atacó la cabaña en la que estaban, y Vera quedó inconsciente. Al despertar, Hulk había desaparecido y Calvin aparentemente había fallecido {H2 161; AA 13~ 16}.

Cuando se enteró de que Hank había ingresado en los Vengadores, Vera fue a visitarlo, emocionándose al conocer al Hombre Maravilla, la Bruja Escarlata y la Visión. Sin embargo, un skrull haciéndose pasar por Jarvis la sirvió una taza de te envenenado que la sumergió en un estado catatónico. Bestia recurrió a Mister Fantástico y al Doctor Extraño para curar a Vera, y al final fue Daimon Hellstrom el que pudo devolverla a la vida {A 209; DEF 105~ 107}.

Hank se afilió entonces con los Defensores, y Vera se quejó de que cada vez pasaban menos tiempo juntos. Al final, decidieron terminar la relación, pero Hank le dijo que todavía la amaba, y la regaló un reloj con una señal que le avisaría si tenía problemas alguna vez {DEF 149}.

Más tarde, Vera y Hank retomaron brevemente su relación, cuando éste militaba en una nueva formación, Factor-X, y sufrió un nuevo cambio corporal, perdiendo el pelaje azul. Vera también cambió su aspecto, abandonando sus aires de bibliotecaria, y se convirtió en una militante política pro-mutante {XF 2~ 8}.

Tiempo después, Vera comenzó a trabajar como profesora, y se convirtió en víctima de una maniobra de la mutante Infectia para capturar a Hank. Infectia contrató a Mesmero para hipnotizar a Vera y tender una trampa a Hank. Sin embargo, Hank consiguió derrotar a Mesmero y liberar a Vera de su control {XF 55}.