Gibborim

Esta raza entronca directamente con la tradición hebraica siendo considerados parte de los Dioses Primigenios como Set o Gea. La palabra Gibborim que define a esta raza tiene su origen en el lenguaje hebreo denominando en el Libro de Génesis a enormes hombres que fueron engendrados al relacionarse hembras humanas y ángeles caídos conocidos como Nefilim. Los Gibborim gobernaron la tierra antes de la evolución humana aunque algunas versiones Bíblicas les incluyen durante el mundo antediluviano. Se supone que los tres miembros conocidos en la actualidad pudieran ser los descendientes de los dioses cananitas y mesopotámicos. El hecho de que los viejos dioses de este panteón parecen haber degenerado a demonios, convertirían a estos tres arcanos en un inicio de transformación.

La primera intervención moderna de los Gibborim se sitúa hace 25 años cuando invocaron a seis parejas en un lugar escondido bajo el mar que actuaba como portal entre su mundo y la Tierra. Con la misión de recuperar su poder en nuestro planeta y pensando destruirlo tal y como es conocido los Gibborim ofrecieron a estas parejas seis puestos en el futuro paraíso si seguían sus órdenes, así como éxito hasta la llegada del fin del mundo. A cambio las parejas se reunirían bajo el nombre del Orgullo y sacrificarían almas humanas anualmente para alimentar a los dioses {RUNAW 15}.

Sin embargo todas las parejas tuvieron un único hijo y decidieron darles a ellos las plazas en el futuro paraíso. Aún así en uno de sus actos de sacrificio sus hijos descubrieron la naturaleza de villanos del Orgullo y huyeron de ellos formando el grupo de los Runaways, aunque este hecho fue ocultado a los Gibborim.

Por ello cuando llegó el momento del rito final que acabaría con la Tierra por parte de los Gibborim, LOS Runaways decidieron enfrentarse a sus padres dentro de la guarida de los gigantes. A pesar de que acabaron venciendo a sus progenitores, el líder de los Runaways, Alex Wilder, traicionó a sus compañeros y se posicionó junto al Orgullo lo que provocó la derrota de los chicos. Sin embargo esto no evitó que Molly Hayes liberara al alma necesaria para el sacrificio por lo que los Gibborim cuando aparecieron exigieron un culpable por lo que había ocurrido y asesinaron a Alex creando un combate entre los gigantes y los miembros del Orgullo que parecieron morir cuando la base bajo el mar fue destruida. Sin embargo los Runaways fueron rescatados por su miembro Chase Stein con la Rana Saltarina {RUNAW 17}. Destruyendo este portal los Gibborim se refugiaron en su propia dimensión conocida como Reino de Sueños.

A raíz de una serie de circunstancias que llevaron a la fundación de un nuevo Orgullo, uno de los miembros de la original alineación del Orgullo, Geoffery Wilder, fue desplazado de su versión venteañera a la actualidad. Al frente de su nuevo Orgullo secuestró a la joven mutante Molly Hayes. Geoffrey Wilder utilizó un anillo mágico antiguo que poseían los Minoru para acceder a la dimensión de los Gibborim quienes le reprendieron por su anterior fracaso, pero Wilder pidió a los Gibborim que resucitaran a su esposa y su hijo Alex, a cambio del sacrificio de un alma humana inocente que terminara el rito de la Tormenta, permitiendo que los Gibborim llevaran a cabo su recreación del mundo. Wilder estuvo a punto de sacrificar a Molly pero los Runaways lo impidieron consiguiendo devolver a Wilder al momento del tiempo en el que había sido robado y una vez más los Gibborim se quedaron sin su sacrificio. Sin embargo el combate también produjo una baja entre los Runaways ya que Gertrude Yorkes fue asesinada por Wilder {RUNAW2 16~ 18}.

Chase Stein no pudo repornerse de la muerte de su novia por lo que decidió viajar junto a Compasión al reino de los Sueños donde residían los Gibborim sabiendo que éstos poseían el poder suficiente para resucitarla. Los Gibborim explicaron a Chase que a cambio necesitaban un sacrificio humano antes de doce horas que es lo que les quedaba de vida.

Chase volvió a la guarida de los Runaways a tiempo de contarle a su compañero Nico su plan de resucitar a Gretrude para lo que pensaba sacrificarse a sí mismo pero necesitaba robarle su báculo y noquearla. Aún así los Runaways consiguieron seguirle en secreto gracias a la ayuda de Compasión a la dimensión de los Gibborim para impedir el suicidio.

Los Gibborim no aceptaron el suicidio de Chase como sacrificio ya que no podía ser voluntario por lo que derrotaron a los Runaways y se propusieron acabar con la vida de Nico. Victor Mancha y una Molly, guiada en secreto por la voz de Alex Wilder, retrasaron el sacrificio de su amiga hasta que se completó el tiempo de supervivencia de los Gibborim provocando que desaparecieran de esa dimensión y la destrucción del Reino de los Sueños.

Mientras los Runaways huían las almas de los Gibborim viajaron a una especie de limbo blanco del más allá donde se encontraron con el alma perdida de Alex Wilder. Por el momento los tres miembros conocidos de esta raza permanecen allí {RUNAW2 20~ 24}.